El presidente de Venezuela Nicolás Maduro dijo este lunes desde la sede del Consejo Nacional Electoral, que “no le interesan las sanciones” impuestas por Estados Unidos.
“Si no me intimidan las sanciones del imperio, no me intimida nada”, precisó el mandatario de la nación sudamericana fuertemente criticado por la oposición y la comunidad internacional.
Maduro además dijo que las sanciones solo muestran “la desesperación y el odio de Trump”.
El lunes, horas después del anuncio de la Casa Blanca, el presidente Nicolás Maduro agradeció al Consejo Nacional Electoral por la jornada de votación del domingo.
Sanciones de Estados Unidos a Maduro
Más temprano, El Departamento del Tesoro de Estados Unidos sancionó al presidente de Venezuela Nicolás Maduro tras la jornada de elecciones para la Asamblea Constituyente, que según el Consejo Nacional Electoral, obtuvo un 41,53 % de participación y la oposición calificó de “fracasada y desolada”.
Como resultado de la decisión, “todos los activos de Nicolas Maduro sujetos a la jurisdicción de los Estados Unidos están congelados, y se prohíbe a las personas estadounidenses tratar con él”.
El secretario del Tesoro Steven Mnuchin hizo el anuncio en la Casa Blanca; junto con el general H.R. McMaster, asesor de seguridad nacional del presidente Donald Trump.
“Las ilegítimas elecciones de ayer confirman que Maduro es un dictador que menosprecia la voluntad del pueblo venezolano”, dijo Mnuchin. “Al sancionar a Maduro, Estados Unidos deja clara su oposición a las políticas de su régimen y nuestro apoyo al pueblo de Venezuela que buscar devolver su país a una democracia plena y próspera”, agregó.
Señaló que habrá más sanciones contra los aliados de Maduro y que todas las opciones están sobre la mesa. “Todo el que participe en esta ilegítima (Asamblea Constituyente) puede exponerse a futuras sanciones de Estados Unidos por participar en el socavamiento de los procesos e instituciones democráticas en Venezuela”, enfatizó.
Anteriormente, un comunicado de la Oficina de Control de Bienes Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro indicaba la designación del Presidente de Venezuela, Nicolás Maduro Moros, de conformidad con la Orden Ejecutiva 13692, que autoriza sanciones contra funcionarios actuales o antiguos del Gobierno de Venezuela y otros “que están socavando la democracia en Venezuela”.
El general McMaster, leyó un comunicado del presidente Trump, que destaca los llamados hechos por el mandatario desde el inicio de su mandato para que Maduro “respete la constitución de Venezuela, respete el rol de las autoridades de la Asamblea Nacional establecida bajo la Constitución, realice elecciones libres y justas, responda a las necesidades humanitarias, deje en libertad a los prisioneros políticos y deje de oprimir a su gran pueblo”.
El régimen se ha negado a escuchar estos llamados, “y sus acciones que culminaron en la ultrajante toma del poder absoluto mediante una elección fraudulenta de la Asamblea Nacional Constituyente, representa un golpe muy severo a la democracia en nuestro hemisferio”, leyó McMaster.
“Maduro no solo es un mal líder, ahora es un dictador”, citó el general,.
El asesor de Trump reiteró el respaldo de Estados Unidos al pueblo de Venezuela y prometió que el gobierno de Trump trabajará con los gobiernos aliados para hacer que todos los responsables de la escalada de violencia y violaciones de derechos humanos en Venezuela respondan por su participación. Dijo además que como ha advertido Trump, su gobierno tomará acciones firmes y rápidas, “y mantendrá su promesa”.
Reacciones
Las reacciones de legisladores estadounidenses no se hicieron esperar.
El legislador republicano por Florida Mario Díaz-Balart, dijo que las “4 rondas de sanciones k el gobierno de Trump ha emitido en los últimos 6 meses expresan su solidaridad con los VZ que luchan por su libertad”, y prometió que: “El congreso seguirá trabajando con Trump para ayudar al heroico pueblo de #Venezuela recuperar sus derechos y libertades fundamentales”.
“Hay consecuencias por socavar violentamente la democracia & atacar manifestantes pacíficos. Pueblo de Venezuela: EE.UU. está con ustedes”, escribió el senador demócrata por Nueva Jersey, Robert Menéndez.
La legisladora Ros-Lehtinen, junto con el senador Marco Rubio (ambos republicanos por Florida), han sido unas de las más voces críticas en las denuncias contra el régimen de Nicolas Maduro.
En el Senado, el demócrata por Florida, Bill Nelson, también elogió las sanciones a Maduro anunciadas por el gobierno estadounidense, y pidió a sus colegas llevar a debate la medida propuesta en mayo por un grupo de 10 legisladores, que además de él incluyen a Rubio, Ben Cardin (demócrata por Maryland) y otros.
Llamada Ley de Asistencia Humanitaria Venezolana y Defensa de la Gobernabilidad Democrática, la legislación responde a muchos de los aspectos de la crisis en Venezuela: aplica sanciones a los funcionarios del régimen, autoriza la asistencia humanitaria que desesperadamente necesita Venezuela, respalda los esfuerzos de la OEA para buscar el fin de la crisis, financia organizaciones que observan elecciones y grupos que trabajan para defender la democracia en Venezuela.
Nelson pidió el apoyo del Senado a la propuesta bipartidista, además de exhortar a que se suspendan las importaciones de petróleo venezolano a Estados Unidos y dijo que junto con otros senadores ha escrito una carta al Comité de Presupuesto para que se continúen los programas pro’democracia que apoyan a la legítima Asamblea Nacional de Venezuela y a la sociedad civil, la defensa de los derechos humanos y alientan una prensa independiente.
El plan presupuestario de la administración Trump propone recortar los fondos para esos programas.
Sanciones anteriores
El domingo, la embajadora de EE.UU. ante la ONU Nikky Haley descalificó el proceso electoral en Venezuela. A través de su cuenta de Twitter, la diplomática expresó: “La fraudulenta elección de Maduro es otro paso hacia la dictadura. Nosotros no aceptaremos a un gobierno ilegítimo. El pueblo venezolano y la democracia prevalecerán”.
El 26 de junio, el Departamento del Tesoro anunció sanciones contra trece altos funcionarios del gobierno de Maduro, ellos, el ex vicepresidente Elías Jaua, la presidenta del Consejo Nacional Electoral, Tibisay Lucena, el defensor del pueblo, Tarek William Saab y un vicepresidente de la estatal petrolera, PDVSA.
Nicolás Maduro fue elegido Presidente de Venezuela el 14 de abril de 2013, tras la muerte del ex presidente Hugo Chávez. Maduro ocupó cargos anteriores en el gobierno venezolano, incluyendo como Vicepresidente Ejecutivo y Ministro de Relaciones Exteriores.