HARARE (Xinhua) — El presidente de Zimbabwe, Robert Mugabe, dijo que presidirá en diciembre el Congreso del partido gobernante para resolver los problemas que asolan a la Unión Nacional Africana de Zimbabwe-Frente Patriótico (Zanu-PF).
El mensaje de Mugabe transmitido por televisión se produce después de que el Zanu-PF decidió destituirlo de la posición de líder del partido y darle hasta el mediodía del lunes para renunciar como presidente, o enfrentará procedimientos de destitución.
En su mensaje desde la Casa de Estado y rodeado de generales del ejército, Mugabe reconoció la presencia de males que afectan su partido y dijo que el próximo mes presidirá el congreso del Zanu-PF para resolver los problemas de una vez por todas.
Mugabe dijo que acepta las preocupaciones planteadas por los generales del ejército en una reunión en la Casa de Estado, en el sentido de que el partido está obstaculizando la economía del país.
“Las disputas públicas entre funcionarios de alto nivel del partido y del gobierno, exacerbadas por múltiples mensajes conflictivos tanto del partido como del gobierno, han vuelto ineludibles las críticas contra nosotros”, dijo Mugabe.
Mugabe dijo que algunos conflictos del partido fueron causados por el conflicto intergeneracional, el cual debe resolverse y armonizarse a través de la fusión de los actores ya establecidos con los nuevos participantes.
El presidente dijo que la operación militar del miércoles pasado fue motivada por las preocupaciones surgidas a partir de una lectura del estado de las cosas en el país y el partido.
Mugabe dijo que en su reunión con los comandantes resaltaron la necesidad de que el partido inicie de forma colectiva un proceso que regrese el país a la normalidad.
El presidente aclaró que la operación militar no representa una amenaza al orden constitucional ni un desafío a su autoridad como jefe de Estado y de gobierno y como comandante en jefe de las fuerzas de defensa de Zimbabwe.
Mugabe expresó su alegría por el continuo funcionamiento de las instituciones estatales durante el breve período de intervención militar.
El presidente también reconoció el papel desempeñado por los combatientes de la guerra de liberación y dijo que el partido se esforzará para garantizar su bienestar y garantizar su participación en posiciones estratégicas del partido y del gobierno.
“La era de victimización y decisiones arbitrarias debe quedar atrás y debemos abrazar el nuevo espíritu predicado en la ley suprema de nuestro partido”.