En sus tres años al frente del FBI, Comey se ha expresado con franqueza sin seguir necesariamente la línea de la Casa Blanca demostrando su independencia.
Al director del FBI, James Comey no le espera una tarea fácil con Donald Trump como comandante en jefe de Estados Unidos.
Comey deberá demostrar una vez más la total independencia con la que se ha desempeñado como director del Buró de Inteligencia de EE.UU. y que ha sido tan fuertemente criticado por el presidente electo.
Durante la campaña presidencial, Donald Trump cuestionó la integridad del FBI al sugerir que actuaba a favor de Hillary Clinton en la investigación de los correos electrónicos de la candidata demócrata cuando era secretaria de Estado.
Además señaló que al llegar a la presidencia nombraría un fiscal especial para que investigue a Hillary Clinton y el mal uso de su cuenta personal de correo electrónico con lo que dejó claro que no confía con el trabajo que realizó el FBI.
La campaña de Trump no ha confirmado si el magnate realmente piensa cumplir esa amenaza.
En la postura sobre el terrorismo radicalizado en EE.UU. también difieren. Trump dijo durante su campaña que EE.UU. estaba siendo penetrado por un “Islam radicalizado” mientras Comey se mostró más mesurado.
Trump ha expresado que le gustaría mejorar las relaciones con el presidente ruso, Vladimir Putin, mientras Comey ha advertido sobre las supuestas infiltraciones rusas para interferir en la campaña política.
El FBI no respondió a un mensaje preguntando por los planes de Comey, pero James McJunkin, ex director adjunto del FBI, dijo que dudaba que Comey se sintiese demasiado molesto con los comentarios de Trump. Indicó que cuando Obama lo designó en el 2013, Comey sabía que podía servir ante presidentes de dos partidos diferentes, con visiones probablemente muy distintas.
“Para él esto debe ser cosa de todos los días”, expresó McJunkin. “Creo que los políticos dicen cualquier cosa que les pueda servir en determinado momento y que cuando asuma, Trump se va a dar cuenta de lo importante que es la independencia que ha demostrado Comey”.