La Asociación Médica Nicaragüense (AMN), informó que la fuga de cerebros médicos sigue en aumento, dado que en la última semana unos ocho médicos decidieron abandonar el país ante las “amenazas, intimidación, persecución política y despidos injustificados”.
Los médicos que acudieron al llamado de los ciudadanos heridos o que se negaron a cumplir la orientación de no atender a los manifestantes, son los “perseguidos”, comentó a un medios de comunicación el doctor Carlos Duarte, secretario de la junta directiva de la AMN.
El Gobierno de Daniel Ortega inculpa a los protestantes de “golpistas y terroristas” y aproximadamente unos 200 especialistas en medicina han sido despedidos.