El único buque capaz de proporcionar apoyo sólido para un despliegue completo no puede navegar en este momento, asegura The Telegraph
Reino Unido no está preparado para mandar sus portaviones al mar Rojo en medio de la escalada hostilidades en la región tras la ofensiva a gran escala, en coordinación con EE.UU., contra objetivos hutíes en Yemen, asegura el diario The Telegraph.
Actualmente la Armada británica pasa por una crisis de reclutamiento que está afectando a todas las Fuerzas Armadas. En este contexto, el periódico señala que esa situación ha perjudicado al grupo de ataque de portaviones de Reino Unido (CSG por sus siglas en inglés), formado por una agrupación de buques de guerra avanzados, submarinos, helicópteros y cazas de quinta generación encabezada por un portaviones.
Se ha hecho un llamado al HMS Queen Elizabeth, buque insignia de la Marina Real británica, para participar en el CSG. No obstante, y de acuerdo con el medio, el único buque de apoyo sólido capaz de proporcionar la cantidad de municiones, aviones, equipos de repuesto y alimentos necesarios para un despliegue completo es el RFA Fort Victoria, que en este momento, no puede navegar por falta de personal. En tiempos normales opera con una tripulación de 100 efectivos, pero ahora está operando con una cantidad mínima de personal.
Este barco de almacenamiento, actualmente el único de su clase, no está en actividad pese a que fue sometido a reparaciones tras participar con el CSG en una misión en el Indo-Pacífico en 2021 y, aunque mecánicamente está en buenas condiciones, en la actualidad se encuentra en un astillero de Liverpool. Esta situación obedecería a que se ha dado prioridad a tripular otros buques de la Real Flota Auxiliar (RFA), que es la que suple las necesidades en alta mar de toda la Marina.
Lord West, excomandante de los servicios navales británicos, califica de “atroz” que la Armada haya permitido que el Fort Victoria llegara al estado en que se encuentra. En su opinión, las autoridades marítimas tenían que haberse asegurado de que la embarcación “estuviera en óptimas condiciones en caso de que fuera necesario”.
Dotar de suficiente tripulación al buque requiere tiempo para la capacitación del personal. Es por eso que fuentes de Defensa insisten en que existen otras formas de apoyar al CSG, como trabajar con otras naciones para garantizar a los portaviones todos los suministros necesarios En este sentido, el experto naval Pete Sandeman advierte que la ausencia del Fort Victoria podría constituir un verdadero problema “si sucede algo más grave” en el mar Rojo. “Solo se puede confiar en el apoyo logístico de naciones amigas hasta cierto punto”, recalcó.
“Es increíble que, cuando las cosas empezaron a calentarse en la región del mar Rojo, no se tomase la medida inmediata de enviar un portaviones”, comentó al respecto West.