Los acusados reciclaron ilegalmente 178 toneladas de botellas de plástico y latas de aluminio
La Fiscalía General de California ha presentado cargos contra una familia que ganó millones de dólares reciclando botellas y latas de manera fraudulenta en centros de manejo de desechos estatales.
Según detallan las autoridades, cada vez que se compra un producto envasado en una botella de plástico o una lata de aluminio en el estado de California, se paga un importe de entre 5 y 10 centavos, que se pueden recuperar al llevar los contenedores a reciclar.
Aprovechándose de este programa de reciclaje, ocho miembros de una familia importaron cerca de 178 toneladas de botellas y latas usadas de Arizona, una operación fraudulenta que les reportó 7,6 millones de dólares en ganancias.
En la denuncia penal, las autoridades acusaron a la familia de conspirar ilegalmente para cometer un hurto mayor y defraudar sistemáticamente al programa de reciclaje de California al solicitar el reembolso del importe de reciclado con envases adquiridos fuera del estado y con contenedores que ya habían sido canjeados.
Del mismo modo, los agentes le incautaron a los acusados cientos de kilos de envases reciclables importados ilegalmente por un valor de un millón de dólares.
“El programa de reciclaje de California está financiado por los consumidores, y ayuda a proteger nuestro medio ambiente y nuestras comunidades. Quienes intenten socavar su integridad mediante operaciones delictivas tendrán que rendir cuentas”, comentó el fiscal Rob Bonta.