Los resultados de la investigación podría brindar información valiosa sobre cómo los humanos algún día conseguirían establecer contacto con formas de vida extraterrestres
En un experimento histórico, un equipo de científicos de La Universidad de California en Davis (EE.UU.), la Alaska Whale Foundation y SETI (Búsqueda de Inteligencia Extraterrestre, por sus siglas en inglés) logró establecer una especie de conversación con una ballena jorobada durante 20 minutos, según un comunicado de SETI.
Durante el experimento frente a la costa de Alaska, los investigadores lanzaron desde un barco un altavoz submarino que generó una “señal de contacto” para las ballenas jorobadas. En respuesta, una ballena hembra llamada Twain se acercó y rodeó la embarcación, mientras respondía en un estilo conversacional a la “señal de saludo”.
Las señales de ballenas son similares a un saludo humano. Las ballenas los utilizan para llamar a otros ejemplares o para indicar su ubicación, según un estudio revisado por pares y publicado en la revista PeerJ.
Durante los 20 minutos, los científicos emitieron la misma llamada de contacto 36 veces en diferentes intervalos, y Twain respondió a cada llamada, incluso coincidiendo estrechamente con las pausas. Este tipo de coincidencia de intervalos sugiere que Twain estuvo involucrada en un intercambio intencional, explicó Fred Sharpe, coautor e investigador principal de la Alaska Whale Foundation.
“Las ballenas jorobadas son extremadamente inteligentes, tienen sistemas sociales complejos, fabrican herramientas (redes de burbujas para pescar) y se comunican ampliamente tanto con canciones como con llamadas sociales”, dijo Sharpe.
Por su parte, Brenda McCowan, autora principal del estudio, considera que “este es el primer intercambio de comunicación entre humanos y ballenas jorobadas en el ‘lenguaje’ jorobado”.
¿Qué tiene que ver esto con los extraterrestres?
El comportamiento de Twain puede ser similar a los intentos de establecer contacto con formas de vida alienígena inteligentes, según el comunicado de SETI.
“Hay una variedad de especies en este planeta, y al estudiarlas, podemos comprender mejor cómo podría ser la inteligencia extraterrestre, porque no se parecerá en nada a la nuestra”, sostuvo McCowan.