Según informó el diario El Nuevo Herald ayer miércoles, la Casa Blanca suspendió discusiones sobre sanciones a Venezuela, por preocupaciones de que reducir el suministro de petróleo “afectaría a los estadounidenses que batallan con la devastación causada por los huracanes Harvey e Irma”.
Según información aportada a periodistas antes de imponer sanciones al sector petrolero venezolano, Washington debe determinar cómo esto afectaría al país tras el paso de los huracanes Harvey e Irma.
“Estamos al tanto de la situación”, dijo el alto funcionario al diario El Nuevo Herald. “Lo que tenemos que observar es cómo las refinerías de la región responden a los daños y qué significa eso para los precios en Estados Unidos”, precisó la fuente consultada.
En el mes de agosto, Estados Unidos aplicó las primeras sanciones económicas a Venezuela, que entre otras medidas, prohibió futuras operaciones de deuda del gobierno y bonos emitidos por PDVSA.
El impacto de las sanciones, afectaba en paralelo, a las compañías petroleras extranjeras que financian proyectos en Venezuela y las entidades financieras que negocian con PDVSA, estarían evitando firmar acuerdos que pudieran involucrar a Zerpa, agregaron los consultados.