Una nueva investigación de un antiguo y remoto pueblo nicaragüense ha revelado el entierro humano más antiguo en la parte inferior de América Central, que data de aproximadamente el año 3900 a.C., hace casi 6.000 años, y representa lo que los arqueólogos dicen que es una «contribución importante para nuestra comprensión de los principios de la gente de la región». Además, la mujer estaba seriamente secuestrada.
La arqueóloga Mirjana Roksandic reveló un estudio sobre el entierro humano más antiguo del mundo, que contenía los restos de una mujer, cuyos huesos permanecieron intactos durante más de 5.900 años, en Nicaragua.
Roksandic, autora principal del estudio, detalló la investigación en la revista Antiquity. “[Ella] fue enterrada en un túmulo funerario, lo que redujo la acidez del suelo y ayudó a preservar los restos”, explicó la científica.
Agregó que, normalmente, en los lugares tropicales no se conservan los restos humanos.
“La mujer fue enterrada a unos 2,3 metros bajo tierra, en un pozo ovalado poco profundo. Estaba de espaldas, con las piernas flexionadas hacia el estómago y los brazos a los costados de su cuerpo”.
Asimismo, expuso que un análisis reveló que probablemente tenía entre 25 y 40 años en el momento de la muerte, y 1,5 metros de altura, lo que se consideraba una estatura promedio en América Central.
Mencionó la investigadora que, al igual que otras personas que comen muchos mariscos, la mujer tenía un gran desgaste en los dientes. “Desarrolló gran musculatura en el antebrazo, posiblemente debido al remo (la actividad que incluso hoy en día es muy común entre el pueblo local) o actividades similares”, señaló Roksandic.
Actualmente, los restos de la mujer se encuentran en el Museo Histórico Cultural de la Costa del Caribe CIDCA en la ciudad nicaragüense de Bluefields.