Fueron detenidas un par de mujeres de origen nicaragüense de apellidos Gutiérrez y Narváez supuestamente dirigir dos bandas criminales, que se dedicaban a introducir marihuana y cocaína de forma menudeada dentro de las cárceles en Costa Rica, y reclutaban a otras féminas que también eran nicas, informó el Ministerio de Seguridad Pública.
Las dos mujeres fueron capturadas por la Policía de Control de Drogas (PCD) del Ministerio de Seguridad, con respaldo de la Policía Penitenciaria del Ministerio de Justicia.
La institución costarricense revela que hay un total de diez personas que fueron capturadas, de estas tres nicas y siete ticos, de las cuales seis estaban presas en las cárceles de El Roble, en Puntarenas (Pacífico), La Leticia y en La Reforma (centro del país), de apellidos Mora, Gómez, Valverde, Miranda, Carby y Arley, respectivamente.
Gutiérrez y Narváez, más otra persona de apellido Sánchez han sido detenidas en sus casas después de ocho allanamientos hechos en Cinco Esquinas de Tibás y Curridabat, ambos cantones de San José, capital de Costa Rica, según informa la Fiscalía en una nota oficial.
Hay otro hombre más, de apellido Montanaro, fue detenido en Tibás el martes por el delito de extorsión, durante una acción policial de un caso independiente.
Las autoridades además hicieron el decomiso de más de tres kilos de droga, entre marihuana y cocaína que hicieron intentos de introducir a los centros penitenciarios, entre otros elementos probatorios.