
Leticia Jacobo.
Una joven nativa americana casi fue deportada de EE.UU., luego de que agentes de inmigración emitieran por error una orden en su contra, según informa Arizona Mirror.
Leticia Jacobo, de 24 años, estaba a punto de ser liberada después de cumplir un mes en una prisión de Iowa, cuando las autoridades le informaron a su madre que iba a ser entregada al Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés), pese a que pertenece a la comunidad indígena Salt River Pima-Maricopa, del estado de Arizona.
Su liberación estaba agendada para el 11 noviembre, día en que terminaba su condena por conducir con la licencia suspendida. Sin embargo, lo que debía ser un proceso sencillo se convirtió en una odisea que se extendió hasta la madrugada siguiente.
Su madre, Ericka Burns, totalmente indignada, pidió una explicación a los oficiales de la prisión, pero estos solo respondieron que el tema podía ser tratado únicamente por agentes del ICE y que la “deportarán a donde sea que la lleven”. Decidida a no permitir tal error, Burns se plantó en el recinto y llevó una copia del acta de nacimiento de Jacobo. Tras la aclaración del asunto, la joven fue liberada.
Fue un “error humano”
El teniente Mark Chance explicó que todo se trató de un malentendido, producto de una confusión administrativa. Según afirmó, la orden de Jacobo en realidad iba dirigida a otra persona que fue ingresada a la cárcel al mismo tiempo, pero terminó en su expediente por un “error humano”.
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Sin embargo, una tía de la afectada denunció al medio que el incidente fue causado por “discriminación racial”. “Ella ya ha estado allí antes, tienen antecedentes penales sobre ella; ¿por qué cometerían un error con alguien que viene constantemente?”, se cuestionó, asegurando que Burns está considerando emprender acciones legales.