“Callando a periodistas no se puede ocultar la verdad” es una vieja consigna que en las actuales circunstancias cobra mayor vigencia.
¿Cuantas radios AM y FM en todo el país han pasado de una a otra mano? Difícil de cuantificar, pero el discurso recurrente en estos medios a nivel nacional pone al descubierto en poder de quienes se encuentran estos importantes instrumentos que seis años atrás otorgaban empleo a muchos profesionales de la comunicación.
La Prensa escrita-plana- sigue viva como el ícono que ha sido a través de la historia contemporánea de nuestra nación. La Prensa de Pedro Joaquín Chamorro censurada por unos y otros, destrozada a cañonazos al final… “Lo muertos fueron ellos”.
El Nuevo Diario que surgió con la impetuosidad de Danilo Aguirre Solís y Javier Chamorro –19 mayo 1980- sin marginar a un selecto equipo profesional del periodismo nicaragüense. De eso ya no queda nada más que un periódico estéril bajo la sombra del poder cuyo epitafio ya está escrito.
Los Canales de Televisión uno a uno han sido comprados bajo diversas causales o condiciones. Al final casi todos en poder de una sola familia con el mismo discurso. Enfermizo.
El periodismo combativo esta por allí “en algún lugar de Nicaragua” humillado esperando su redención. La tendrá. Castigo para el pensante y premio al que dobla la cerviz ante el poder omnímodo. No se contempla en ninguna cartilla del viejo y moderno periodismo.
Hasta intentos de controlar o prohibir a través de diversos subterfugios el uso del Internet. Sin duda el año entrante volverán a la carga y ya ni siquiera tendremos espacios en Facebook y páginas de Internet. Este espacio ya comenzó a ser invadido por el mismo poder que controla hasta el suspiro del Aedes Aegypti en Nicaragua.
Noticieros serios, históricos, creíbles, balanceados han desaparecido de las ondas hertzianas para dar cabida al mismo formato que gusta a la Pareja Presidencial. “La vieja guardia del periodismo”, los que enfrentaron a la dictadura somocista están vivos y vivas muchos/as de ellos/as pero marginados/as por los que controlan casi todo el espectro de la comunicación nacional.
El Presupuesto Publicitario de la República, -el pastel- es ya solo una vieja referencia en el ámbito periodístico nicaragüense. Las pautas estatales ausentes en los mínimos medios independientes e incontables danzando como fiesta maléfica en los medios oficialistas. Sin control. Sin pena. Todo en familia.
El Periodista Carlos Fernando Chamorro con testigos idóneos como el Cardenal Leopoldo Brenes y el Obispo Silvio Báez mantiene, sostiene y divulga a nivel nacional e internacional la forma como el Gobierno ha tratado –inútilmente hasta el momento- de sabotear o eliminar programas éticos, profesionales, como “Esta Semana” y “Esta Noche” cuyos horarios atraen la audiencia masiva del país. Les duele la verdad y profesionalismo.
Si Carlos Fernando Chamorro cae igual será destrozado el Periódico Digital “Confidencial”. Al liquidar a “ESTA NOCHE” y “ESTA SEMANA” los enemigos de la prensa repetirán otra parte de la triste historia nicaragüense, pues nuestro país, con la ausencia de estos medios creíbles y respetados, “Será como si en Nicaragua no pasara nada”, parodiando un poco a José Coronel Urtecho.
Transcurren los días y los nicaragüenses paulatinamente vamos perdiendo la opción de informarnos objetivamente. Un mañana inmediato donde la chabacanería envuelta con prácticas gobelianas estará presente con mayor rango institucional carente totalmente de legitimidad. Absoluta Obscenidad.
Al final los gobiernos pasan los periodistas quedan para investigar y seguir cumpliendo con el sagrado deber de informar la verdad. Lo dice la historia.
*San Rafael del Sur, Nicaragua, A.C.