El ministro de Relaciones Exteriores de Irán aseguró que su país no descarta negociar con Estados Unidos, incluso después del ataque estadounidense con un dron que mató a un general iraní de alto rango, según una entrevista publicada el sábado.
Mohammed Javad Zarif dijo a la revista alemana Der Spiegel que él “nunca descartaría la posibilidad de que la gente cambie su enfoque y reconozca las realidades”, en una entrevista realizada el viernes en Teherán.
Las tensiones entre Washington y Teherán han aumentado desde 2018, cuando el presidente Donald Trump retiró a Estados Unidos del acuerdo nuclear con Irán. Desde entonces, EE.UU. ha vuelto a imponer sanciones duras que han paralizado la economía de Irán.
No obstante, Zarif indicó que Irán todavía sigue dispuesto a hablar, aunque reiteró la demanda previa de su país de que Estados Unidos tendría primero que retirar las sanciones.
“Para nosotros, no importa quién esté sentado en la Casa Blanca, lo que importa es cómo se comporten”, agregó, citado por Der Spiegel. “El gobierno de Trump puede corregir su pasado, levantar las sanciones y volver a la mesa de negociaciones. Todavía estamos en la mesa de negociaciones. Ellos son quienes se fueron”.
En una entrevista concedida este viernes a NPR por el secretario de Estado, Mike Pompeo, el mismo dijo que Estados Unidos “ha estado involucrado en profundos esfuerzos diplomáticos desde el primer día de la administración Trump” en gestionar un acercamiento con Irán.
Contrario a lo que ha expresado el canciller iraní, Estados Unidos parece estar lejos de ceder actualmente, tal como afirmó Pompeo el viernes a NPR: “(…) Irán se ha acercado a una capacidad (mayor) de armas nucleares. (…) Si el plan es evitar que Irán obtenga un arma nuclear, ¿cómo se hace eso cuando no respetan los límites del antiguo acuerdo y no hay ningún nuevo acuerdo a la vista?”.
Trump sostiene que el acuerdo nuclear de 2015 debe ser renegociado porque no abordó el programa de misiles balísticos de Irán ni su participación en los conflictos regionales. Los otros signatarios del acuerdo nuclear (Alemania, Francia, Gran Bretaña, China y Rusia) han estado luchando por mantener vivo el pacto.
Tras el ataque con un dron de Estados Unidos el 3 de enero, que mató al general de la Guardia Revolucionaria Qassem Soleimani, Irán anunció que ya no cumpliría ninguna de las limitaciones del acuerdo a sus actividades de enriquecimiento nuclear. Luego tomó represalias el 8 de enero, lanzando misiles balísticos contra dos bases en Irak que albergan tropas estadounidenses, causando heridos entre los soldados allí, pero ninguna muerte.