También se detectaron varias docenas de “recién nacidas lloronas” que actualmente están experimentando un gran estallido y cambios en su brillo
Un grupo internacional de astrónomos descubrió una gran cantidad de estrellas “ocultas”, incluidas algunas protoestrellas eruptivas y otras que fueron clasificadas en una nueva categoría de antiguas estrellas gigantes rojas, informó este jueves la Real Sociedad Astronómica.
Un nuevo artículo recientemente publicado en la revista Monthly Notices of the Royal Astronomical Society explica que el hallazgo de las nuevas estrellas tuvo lugar al finalizar un estudio que duró alrededor de una década e incluyó cientos de millones de cuerpos celestes.
De las 222 estrellas que analizaron los astrónomos, solo un tercio pudieron ser clasificadas “como eventos bien comprendidos de varios tipos”, señalaron. La clasificación de los objetos restantes presentó más dificultades, por lo que hicieron uso del telescopio de rastreo VISTA, ubicado en el Observatorio Cerro Paranal (Chile), para obtener los datos espectroscópicos para visualizar los cambios de su brillo.
El descubrimiento de “viejas fumadoras” y “recién nacidas lloronas”
En total, se detectaron 32 protoestrellas en erupción, denominadas como ‘recién nacidas lloronas’, que experimentaron aumentos de brillo de entre 40 y 300 veces su luminosidad. Los autores de la investigación comentaron que la gran mayoría de las explosiones estaban en curso, lo que les permitió examinar por primera vez cómo estas erupciones evolucionan con el tiempo a medida que incrementan en brillo, alcanzan un pico de luminosidad y luego se desvanecen.
No obstante, los astrónomos encontraron en el centro de la Vía Láctea 21 gigantes rojas cuyos intermitentes cambios de brillo a lo largo de varios años eran difíciles de explicar. Después de un análisis de siete de estas estrellas, se determinó que se trataba de un nuevo tipo de antiguas gigantes rojas.
El astrónomo Philip Lucas sostuvo que “estas viejas gigantes rojas” no tenían el mismo comportamiento que las estrellas pulsantes (variables Mira), sino que “simplemente permanecen allí con normalidad y luego, de repente, se oscurecen entre seis meses y varios años”. “Esto es completamente inaudito”, agregó.
Observaciones adicionales mostraron que estos cuerpos celestes parecen estar emitiendo enormes columnas de humo que impiden que su luz llegue hacia nuestro planeta, además de oscurecer a otras estrellas de la misma región. Los astrónomos creen que el humo que expulsan estas denominadas ‘viejas fumadoras’ podría proporcionar una hipótesis sobre su prolongada atenuación.
Lucas apuntó que el hecho de que estas estrellas no sean pulsantes dificulta encontrar una explicación acerca del origen de las columnas de humo. Ante esta situación, el astrónomo sugirió que este fenómeno puede estar relacionado con la alta concentración de elementos pesados cerca del centro de nuestra galaxia, donde se encuentra la mayoría de estas viejas fumadoras.
Por último, los investigadores precisaron que actualmente están tratando de buscar más de este tipo de estrellas para conocer cómo se distribuyen los elementos pesados en el espacio. De acuerdo con Lucas, hasta el momento tienen identificadas más de 90.