La decisión pretende facilitar la vigilancia de los buques extranjeros en la región en discordia
China ha construido dos estaciones terrestres para su sistema de satélites BeiDou en arrecifes en disputa del mar de la China Meridional para vigilar los barcos en la zona, informan medios locales. Las instalaciones comenzaron a funcionar el viernes para “resolver el problema del punto ciego” en las aguas que rodean las islas Paracel.
Las estaciones se encuentran en faros situados en los arrecifes del Norte y Bombay, en las islas Paracel, que también son reclamadas por Vietnam y Taiwán. Están conectadas al sistema de identificación automática de barcos terrestres (AIS) de China y utilizan la red de satélites BeiDou, creada como competidora del Sistema de Posicionamiento Global (GPS) estadounidense, para localizar los barcos y transmitir señales.
Entre los dos arrecifes hay varias instalaciones chinas importantes: la sede de Sansha (municipio creado por Pekín en 2012 para gobernar gran parte del mar de la China Meridional) y varias islas artificiales en las que se han construido bases navales y aéreas. También hay una ruta marítima internacional cerca del arrecife Bombay.
La Administración de Seguridad Marítima de China declaró que las estaciones “servirán de fuerte apoyo” para la vigilancia de los buques en la zona, para la protección medioambiental de islas y arrecifes, y para “proporcionar una guía de navegación más segura y fiable a los barcos en el mar de la China Meridional”.
La zona frecuentemente es escenario de tensiones entre buques del Ejército Popular de Liberación de China y la Armada estadounidense cuando embarcaciones del país norteamericano llevan a cabo las llamadas “operaciones de libertad de navegación” en el área.