SAN FRANCISCO – Un conductor de UPS con una pistola abrió fuego el miércoles en un centro de procesamiento de paquetes de United Parcel Service Inc. en la ciudad estadounidense de San Francisco, matando a tres personas antes de suicidarse cuando se acercaba la policía.
Las víctimas eran conductores como el atacante, dijo el jefe de Relaciones con Inversionistas en UPS, Steve Gaut, dijo que el atacante y las víctimas eran todos conductores y que el hombre disparó mientras los trabajadores se preparaban para su reunión matutina antes de salir a sus rutas.
Dos personas más resultaron heridas y fueron llevadas a un hospital de la zona, dijo la policía de San Francisco, que no ha identificado al atacante ni a las víctimas.
El incidente no estuvo relacionado con terrorismo, aunque no se conoce el motivo, dijo el subjefe de la policía, Toney Chaplin, en una rueda de prensa.
La policía recuperó dos armas de fuego en la instalación de UPS, que tiene 350 empleados, entre ellas el arma del atacante, que fue descrita como una “pistola de asalto”.
El incidente en San Francisco ocurrió horas después de otro tiroteo no relacionado contra legisladores republicanos que practicaban cerca de Washington para un partido de béisbol de caridad. El atacante hirió al líder republicano Steve Scalise y a varios otros antes de recibir un disparo fatal de la policía.
“Siempre nos entristece la pérdida de vidas por la violencia con armas de fuego. Cualquier tiroteo es demasiado”, escribió el alcalde de San Francisco, Ed Lee, en su cuenta de Twitter.
Gaut de UPS dijo que los empleados del local habían sido enviados a sus casas cuando se levantó el bloqueo y que cree que la mayoría abandonó el edificio. La empresa está ofreciendo servicios de asistencia por trauma a los empleados.
Un video en vivo mostró una masiva presencia policial cerca de las instalaciones de UPS, y oficiales sacando a empleados mientras se abrazaban en la acera.
“Nuestros pensamientos y plegarias están con todos los que han sido afectados por este incidente”, dijo UPS en un comunicado. Una declaración similar de condolencias fue emitida por James Hoffa, presidente del sindicado de camioneros que representa a trabajadores de UPS.
El tiroteo sucedió tres años después de que otro empleado de UPS disparara y matara a dos de sus supervisores antes de suicidarse en un centro de distribución de UPS en Birmingham, en el estado de Alabama. El atacante había sido despedido hacía poco de la empresa.
El tiroteo más letal en la historia moderna de Estados Unidos sucedió en junio del 2016 cuando un atacante alegando lealtad a Estado Islámico mató a 49 personas en el club nocturno Pulse en Orlando, Florida.
Estados Unidos tiene una de la leyes de armas más permisivas entre los países desarrollados, con el derecho de “tener y portar armas” resguardado en la Segunda Enmienda de la Constitución. Los esfuerzos por controlar las armas han fallado tras los tiroteos en masa en una escuela primaria en Newton, Connecticut, en el 2012 y el ataque en el club de Orlando.