Casada con un barón de la droga durante 18 años, Fabiana Escobar busca terminar con el referente ‘romántico’ y aconseja a las novias de los narcos: “Sal corriendo”.
Fabiana Escobar, conocida en Brasil como Bibí Peligrosa, estuvo casada durante 18 años con el narcotraficante Saulo de Sá Silva, quien era considerado el criminal número dos de Río de Janeiro. Hoy, con su ex marido preso y devenida en celebridad gracias a una novela y un libro basados en su vida, aconseja a las chicas “incautas”, como dice que lo fue ella,que se alejen de novios traficantes, informa El Mundo.
“Hasta en las ‘bocas de fumo’ (puntos de venta de droga) la veían”, afirma Escobar, llena de orgullo, sobre el culebrón que produjo O Globo basado en su vida. Llamada también la Baronesa de la coca, Escobar, de 37 años, goza hoy de una gran popularidad en Brasil y se define a sí misma como escritora.
Lo que en un principio fue un blog en el que contaba los pormenores de su vida, se transformó en un libro y en un éxito de ventas. Peligrosa, donde cuenta su vida en el mundo del narcotráfico, se encuentra hoy entre los libros más vendidos en Brasil, gracias a la serie televisiva basada en su vida.
Bibí recibe cientos de mails, cartas y mensajes en las redes, de chicas que buscan consejo. “Me enamoré de un chico, pero me acabo de enterar de que es un bandido”, es un comentario muy común que recibe. Escobar responde sin dudar: “Sal corriendo”.
Así, a las chicas sumergidas en el mundo del crimen les recomienda que huyan de ese entorno lo antes posible. “Cuanto antes lo hagas, será más fácil. Tienes que creer en ti misma, puedes vivir sin él”, aconseja.
Según afirma Bibí, “el vínculo afectivo y el financiero son los dos nudos que pocas mujeres logran deshacer, ya que una mujer enamorada es incapaz de ver el peligro y justifica todo lo que hacen con ella. Creamos un vinculo muy intenso y nos cuesta, más que a los hombres, abandonar a la persona que queremos”, expresa. Ella en particular quiso separarse en repetidas ocasiones, pero recién lo logró luego de cuatro años de intentos.
Un tercio de las chicas a las que Escobar les habla son jóvenes que intentan salir del narcotráfico. Y dice que lo que más le preocupa son los modelos a seguir. Es por eso, afirma, que hoy está filmando su segunda película, ahora con guión propio, y se dedica a la literatura.
«La pobreza y la falta de expectativas es lo que les hace admirar el dinero fácil que ofrecen las drogas. Pero hay otros caminos y dependen de ustedes mismas, no del hombre que tengan al lado», sentencia Escobar.