La guerrilla colombiana del Ejército de Liberación Nacional (ELN) ha reivindicado este lunes la autoría del atentado perpetrado el pasado jueves contra una escuela de Policía en Bogotá. La explosión de un coche bomba en la Escuela General Santander de Cadetes dejó 21 fallecidos y más de 60 heridos.
A través de un comunicado desde La Habana, el ELN manifestó que el ataque fue una respuesta a las actividades militares realizadas por el Gobierno colombiano, que preside Iván Duque, durante el cese al fuego unilateral que ofreció la guerrilla en Navidad y fin de año.
Comunicado del ELN en el que admite la responsabilidad en el atentado que dejó 21 muertos en Bogotá el pasado jueves. Lo justifica como respuesta a avances militares del gobierno de Duque, y (de manera, digamos, paradójica) acaba insistiendo en la necesidad de diálogos. pic.twitter.com/K7aH9LHxF6
— Jorge Galindo (@JorgeGalindo) 21 de enero de 2019
Según el comunicado, el presidente colombiano “no le dio la dimensión necesaria al gesto de paz” de la guerrilla. “Su respuesta fue realizar ataques militares en contra nuestra, en todo el territorio nacional. Pese a ello, cumplimos rigurosamente el cese unilateral de operaciones ofensivas entre el 23 de diciembre de 2018 y el 3 de enero de 2019”, reza el documento.
“Las Fuerzas Armadas gubernamentales aprovecharon este cese para avanzar las posiciones de sus tropas de operaciones, ganando ubicaciones favorables difíciles de conseguir sin el cese”, especifica la publicación.
“Operación Lícita”
El ELN indicó que había elegido a la Escuela de Cadetes de la Policía Nacional como blanco de su ataque ya que es “una instalación militar” y allí “reciben instrucción y entrenamiento los oficiales que luego realizan inteligencia de combate, conducen operaciones militares, participan activamente en la guerra contrainsurgente”.
De esta manera, el ELN calificó el atentado de Bogotá como una “operación lícita” dentro del derecho de la guerra, destacando que “no hubo ninguna víctima no combatiente”. “Valoramos necesario que instituciones internacionales autorizadas den su opinión sobre el carácter de dichas instalaciones y el tipo de acción realizada”, señala el comunicado.
Diálogo de Paz
Del mismo modo, la guerrilla volvió a insistir en pactar un cese al fuego bilateral “para generar un clima favorable a los esfuerzos por la paz” y se mostró dispuesta a “que se respeten determinadas áreas e instalaciones militares estatales” y del ELN, lo cual “aportaría al proceso de diálogos”.
Además, el ELN reiteró su llamamiento a retornar a la mesa de diálogo “para darle continuidad al Proceso de Paz y a la construcción de los acuerdos que traemos desde el Gobierno anterior”.
Por su parte, Duque dio por finalizadas las negociaciones paz con este grupo guerrillero y le exigió la liberación incondicional de los rehenes bajo su poder.