Los agentes perseguían a un sospechoso de robar un coche en Houston, cuando este provocó un accidente y abrió fuego contra los oficiales
John Lally, un exreo que cumplió dos penas de prisión en EE.UU., presenció el pasado sábado un accidente entre la Policía y un sospechoso que poco después abrió fuego en la autopista 59 de Houston, en Texas. Un agente resultó herido y el exconvicto ayudó a sacarlo de la zona del tiroteo para ponerlo a salvo. El video del incidente fue proporcionado por Lally este jueves a USA Today.
La Policía perseguía a un joven de 19 años sospechoso de robar un coche, cuando este chocó contra varios autos, dejando inoperativo el vehículo robado en los carriles principales de la autopista. El oficial Jonathan Gibson se acercó al presunto ladrón y le dio instrucciones, pero el sujeto, en lugar de obedecer las exigencias del agente, le disparó e hirió su pierna.
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Mientras se desarrollaba la persecución, Lally también conducía por la autopista transportando grava. Al ver los patrulleros, pensó que le seguían y se apartó lentamente a un lado de la carretera, pero pronto se produjo el accidente, al que describió como una “explosión” seguida de los disparos. El exrecluso empezó a grabar con su teléfono lo que ocurría para explicar a su jefe la razón de su retraso.
Cuando vio a Gibson herido, corrió hacia él a pesar de las balas y, junto con otro oficial, lo arrastró hasta un lugar seguro. “Cuando llegué a él, lo agarré por el chaleco y otro policía y yo lo arrastramos a la parte trasera de mi camioneta“, recordó. “¿Estás bien, hermano? ¿Estás bien?”, se escucha a Lally preguntar al agente en el video mientras este se retorcía de dolor. También sostuvo el brazo de Gibson y le habló constantemente a la vez que recibía los primeros auxilios.
“He estado en prisión dos veces, hombre“, contó Lally a Gibson. “No tuve más remedio que salir y cambiar mi vida […] y estoy aquí contigo, como si fuera mi llamado estar aquí contigo hoy“, agregó.
Entretanto, continuaba el intercambio de disparos entre la Policía y el sospechoso y, cuando el joven intentó huir del lugar, los oficiales consiguieron herirle para que se detenga. Sin embargo, el delincuente murió camino al hospital. Mientras, Gibson también fue llevado a un centro médico y su vida no corre peligro.
El jefe de Policía de Houston, Troy Finner, agradeció a Lally y a otros ciudadanos por la ayuda. “La gente comete errores”, señaló Finner en una rueda de prensa, refiriéndose al pasado de Lally. “Un individuo verdaderamente reformado es una persona que podemos utilizar. Él dio un paso adelante y otros ciudadanos también, y no quiero que eso se pierda”, declaró.