Con una valoración aproximada de 180.000 millones de dólares en diciembre pasado, la compañía aeroespacial es una de las empresas privadas más valiosas del mundo
Brandon Bell / Gettyimages.ru
Un detalle inusual del contrato de los empleados de la compañía estadounidense de fabricación aeroespacial SpaceX fue revelado el viernes por TechCrunch, citando a sus fuentes.
Según el reporte, la empresa, propiedad del multimillonario Elon Musk, cuya fuerza laboral alcanza aproximadamente 13.000 personas, exige que los empleados acepten algunos términos relacionados con sus adjudicaciones de acciones.
“Un acto de deshonestidad”
Así, entre las inusitadas disposiciones se encuentra el derecho de SpaceX a recomprar acciones adquiridas dentro de un período de hasta medio año después de que un empleado abandone la compañía por cualquier motivo. Los documentos a los que tuvo acceso el medio indican que, si un empleado fue despedido “con causa justificada”, la firma declara que puede recomprar sus acciones por un precio de 0 dólares por acción.
A diferencia de las acciones de empresas públicas, las acciones de compañías privadas no se pueden vender sin la aprobación de su empleador. Sin embargo, SpaceX se otorga el derecho de prohibir a los empleados actuales y pasados participar en ofertas públicas de adquisición si se considera que han cometido “un acto de deshonestidad contra la empresa” o han violado las políticas escritas de la firma, entre otras razones.
Un exempleado comentó que a menudo los trabajadores no son conscientes de la condición relacionada con “deshonestidad” cuando se registran inicialmente en la plataforma de gestión de compensación de acciones. De esta manera, una persona afectada por este supuesto tendría que esperar hasta que SpaceX salga a bolsa para obtener efectivo de las acciones.
Control total
Debido a que los empleados no quieren verse obligados a devolver sus acciones de SpaceX sin compensación, estos términos contractuales “mantienen a todos bajo su control, incluso si han abandonado la empresa”, expuso otro exempleado. “Y dado que SpaceX no tiene urgencia en salir a bolsa, la prohibición de participar en ofertas públicas efectivamente reduce a cero sus acciones, al menos durante mucho tiempo. Aunque pagaste miles para cubrir los impuestos”, agrega.
Musk como un “factor de riesgo”
SpaceX ha redactado documentos para minimizar su responsabilidad legal al advertir sobre los riesgos de invertir en los valores de la empresa. Entre estos factores, destacan los relacionados con Elon Musk.
“Hasta la fecha, la empresa ha dependido en gran medida del liderazgo proporcionado por su fundador, director ejecutivo y director técnico, Elon Musk”, señala el texto de la compañía. “SpaceX, el señor Musk y otras empresas a las que está afiliado el señor Musk con frecuencia reciben una inmensa cantidad de atención de los medios. Como tal, las acciones o declaraciones públicas del señor Musk también podrían tener un impacto positivo o negativo en la capitalización de mercado de SpaceX“, subrayan.
TechCrunch añade que, con una valoración aproximada de 180.000 millones de dólares en diciembre pasado, SpaceX es una de las empresas privadas más valiosas del mundo.