Naciones Unidas – El Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) condenó hoy el alegado empleo de armas químicas en Idleb, Siria, y llamó a ponerle fin al sufrimiento de los niños por el conflicto en el país levantino.
‘Si se confirma, este ataque debería provocar más que nuestro rechazo, debería llevar a aquellos con el poder y la capacidad para hacerlo a acciones que detengan tan devastadora violencia’, afirmó en un comunicado el director ejecutivo de la agencia, Anthony Lake.
El funcionario calificó de horribles las imágenes de seres humanos, entre ellos varios pequeños, muriendo en las calles de Khan Sheikhun, en Idleb, por el efecto de gases químicos.
Nuestros pensamientos y ruegos están con las víctimas y sus familiares, dijo.
Según Unicef, al menos 27 niños estarían entre los muertos confirmados por el denunciado ataque con armas químicas, al cual se atribuyen cientos de víctimas, decenas de ellas mortales.
La víspera, el Consejo de Seguridad de la ONU analizó lo ocurrido en Idleb, y sus miembros demandaron una investigación rápida y objetiva que confirme si se emplearon artefactos de exterminio en masa e identifique a los responsables.
Estados Unidos, Francia y Reino Unido acusaron al gobierno sirio de gasear a civiles, y promovieron una resolución que Rusia descartó respaldar, bajo el argumento de que Occidente sigue empeñada en imponer a Damasco un cambio de régimen, acudiendo para ello a diversas campañas, como la del uso de armas químicas.
Por su parte, Siria reiteró en el Consejo de Seguridad que carece de ese tipo de medios de exterminio masivo.
‘Siria y el ejército sirio no cuentan con armas químicas, nunca las hemos utilizado y nunca las emplearemos’, afirmó en la sesión el representante permanente alterno del país levantino, Mounzer Mounzer.