La Mesa Nacional de Riesgo señala que las quemas de suelos durante el ciclo productivo deben eliminarse
Es una práctica antigua que los campesinos realizan que produce incendios forestales y agrícolas, por lo que se recomienda hacer rondas y delimitar el terreno para que no se pase el fuego a otras propiedades.
Durante el período seco y la prevalencia de los fuertes vientos, no es recomendable hacer quemas en los terrenos, porque el año pasado por insistir con esas malas prácticas, se produjeron 213 incendios forestales y agrícolas con un saldo de más de 3 mil hectáreas perdidas, dijo Denis Meléndez, director de la Mesa Nacional de Riesgos.
Sobre las quemas de los suelos
La quema de rastrojos y restos vegetales que permanecen en el terreno tras la cosecha ha sido una práctica tradicionalmente empleada en las par celas agrícolas como método de preparación de la tierra para la siembra de un nuevo cultivo.
Pueden ser muchos los impactos negativos de esta actividad, principalmente la pérdida de suelo fértil, la desertización y la contaminación de las aguas superficiales y subterráneas, además del elevado riesgo de incendios y la emisión de dióxido de carbono a la atmósfera. Por otra parte, los rastrojos, como residuo orgánico que son, pueden ser empleados como abono en la propia parcela o en otras, o como fuente de energía en centrales de biomasa.