Denuncias de fraude, demoras en el conteo de votos, opositores asesinados por las fuerzas de seguridad y toque de queda. Una historia no contada en el corazón de Latinoamérica
Hace una semana que Honduras atraviesa una crisis institucional, política y social grave. A pesar de esto, organismos internacionales y los grandes medios de comunicación de América Latina, EE.UU. y Europa poco han dicho sobre el tema. Una diferencia notable en relación, por ejemplo, a la cobertura que le han dado todos estos años a lo que pasa en Venezuela.
Una semana después de la elección presidencial, finalmente el Tribunal Supremo Electoral (TSE) hondureño ha dado por ganador a Juan Orlando Hernández, del Partido Nacional, tras realizar un “escrutinio especial”. De todas maneras, la situación no está resuelta, ya que la oposición denuncia fraude y exige revisar detalladamente las actas de votación, algo que la Justicia electoral ha rechazado. Además, la misión de observadores de la Unión Europea (UE) ha sostenido, de acuerdo a Telesur, que el proceso electoral “esta lejos de estar terminado”.
Todo esto sucede en un clima de tensión que ya ha dejado siete muertos por la represión policial y militar y la declaración del toque de queda por parte del Gobierno. Asimismo, sectores de las fuerzas de seguridad se han declarado en huelga. “Nosotros no somos máquinas ni robots y no estaremos exponiéndonos a que nos maten en las calles y a reprimir al pueblo. Además, a nuestra familia nadie la está cuidando”, dijo uno de sus voceros al diario La Prensa.
La elección presidencial
El pasado domingo 26 de noviembre los hondureños asistieron a las urnas para elegir un nuevo presidente. Los principales candidatos eran el actual mandatario, Juan Orlando Hernández, y Salvador Nasralla, de la Alianza de Oposición contra la Dictadura. Este último, contaba con el respaldo del partido Libertad y Refundación (Libre) del expresidente Manuel Zelaya, derrocado por un golpe de Estado en 2009.
Durante toda la jornada se dieron a conocer denuncias de fraude. Joaquín Mayor, observador electoral argentino por la Comisión Permanente de Partidos Políticos de América Latina (Copppal) relató a Notas – Periodismo Popular que en las escuelas “había gente del Partido Nacional con listas de personas y marcaban a quien votaban”. “Incluso hubo situaciones donde gente del Partido Nacional acompañaba a los votantes y les indicaba qué hacer”, denunció.
Además, explicó que el sistema de votación “es muy endeble”, porque en pupitre “ponen tres cartones que te tapan y es muy fácil ver que vota cada persona”.
Actas dudosas
El TSE de Honduras habitualmente brinda resultados definitivos la misma noche del domingo o en la madrugada del lunes. Sin embargo, en esta ocasión eso no sucedió y tanto Hernández como Nasralla se proclamaron ganadores.
En el medio, durante el conteo de votos, “se cayó el sistema tres veces”, recordó el analista internacional y columnista de Telesur Fernando Vicente Prieto en diálogo con RT. En esos cortes se perdieron los datos de más de 5.000 actas de votación. Los partidos políticos que respaldan a Nasralla exigieron entonces que sean revisadas detalladamente.
A pesar de esto, el TSE rechazó el pedido. Vicente Prieto subrayó que este organismo “está presidido por un miembro del partido de Gobierno”, lo cual desde su perspectiva “es un escándalo”. “Previendo eso los partidos opositores plantearon que debía haber un miembro de su alianza en el tribunal”, dijo el analista. Y si bien fue aprobado en el Congreso “tenía que ser ratificado este año y no lo hicieron porque estaban preparando un fraude”, añadió.