El Partido Patriota (PP) y el Libertad Democrática Renovada (Lider), cuyas direcciones sucumbieron ante múltiples cuestionamientos por corrupción y fraude, salen desde ayer del juego político en Guatemala.
El Tribunal Supremo Electoral (TSE) canceló a ambas agrupaciones por irregularidades en los fondos recibidos para la financiación de las campañas política de sus candidatos durante el proceso eleccionario de 2015.
La decisión del órgano rector de los comicios fue anuncia semanas anteriores, pero entró en vigencia con su publicación en el Diario de Centroamérica, de carácter oficial en Guatemala.
De acuerdo con esa publicación, en su versión digital, la cancelación de Lider derivó del desborde de su techo de campaña hasta sobrepasar los 50 millones de quetzales (6,72 millones de dólares) con tal de lograr la aceptación de su presidenciable Manuel Baldizón.
Esa agrupación fue multada varias veces por los gastos desproporcionados en su campaña, los cuales pueden constatarse todavía si se consideran las miles de vallas publicitarias, piedras al lado de las carreteras, postes eléctricos y otros pintados en aras de despertar la atención sobre el político tachado por el pueblo de Copy and Paste.
Mientras que el PP fue incapaz de presentar el informe de descargo solicitado por las incoherencias detectadas a partir de una relatoría acerca de su financiamiento electoral, en medio de la pérdida de credibilidad de la agrupación fundada por el expresidente Otto Pérez Molina, en prisión preventiva por corrupción.