El coste total del programa se estima ahora en más de 131.000 millones de dólares
El reemplazo del arsenal nuclear estadounidense basado en tierra y anclado en los misiles Minuteman III ha sobrepasado su presupuesto de 95.800 millones de dólares debido a la pandemia del covid-19 y a la inflación, recoge Reuters, que cita a la Fuerza Aérea de EE.UU.
Andrew Hunter, subsecretario de Adquisiciones, Tecnología y Logística de la Fuerza Aérea, detalló a la agencia que el organismo está notificando al Congreso que el programa de sustitución del Minuteman III se encuentra ahora al menos un 37 % por encima de la estimación de costes previa a la pandemia. Se detalla que el coste total del programa se estima ahora en más de 131.000 millones de dólares.
Los cambios en el programa, como la fabricación de silos más grandes y el cambio a materiales más duraderos, también rompieron el techo del presupuesto. Mientras, el coste total podría aumentar incluso más a medida que el secretario de Defensa de EE.UU., Lloyd Austin, concluya una revisión antes del verano.
El sobrecoste se deja sentir con mayor intensidad en la modernización de los 450 silos de misiles y su infraestructura de mando, que incluye más de 12.000 kilómetros de cables nuevos. El programa también comprará camiones, formación, edificios de mando y 659 misiles. Según el funcionario, “los misiles en sí no son los culpables del sobrecoste”, escribe Reuters.
“Pasaron más de 70 años desde que hicimos la parte terrestre de esto [del programa]”, afirmó Hunter, agregando que “no lo calcularon bien“.
Según la agencia, la superación de los umbrales de estimación de costes activa la Ley Nunn-McCurdy de 1982, que exige que el Pentágono justifique formalmente ante el Congreso la importancia de un programa en el que los costes de adquisición hayan aumentado más de un 25 % por encima de un valor de referencia, y que demuestre que no existen alternativas.