La Organización de Estados Americanos aprobó ayer lunes por consenso una resolución que incluye las demandas más exigentes que han hecho los países de la OEA hasta ahora al Gobierno de Nicolás Maduro, en una sesión extraordinaria que dejó sin efecto la suspensión ordenada por la presidencia boliviana del Consejo Permanente.
La polémica sesión, fue realizada bajo las protestas de Venezuela, Nicaragua y Bolivia, que el sábado asumió la presidencia pro-Témpore del Consejo.
República Dominicana, El Salvador, Bahamas y Belice, se abstuvieron de votar a favor de la resolución, la misma que expresa una “profunda preocupación por la grave alteración inconstitucional del orden democrático” en Venezuela y el “apoyo continuo por un diálogo y negociación que lleve a la restauración del orden democrático”.
La reunión se realizó bajo la dirección del embajador más antiguo, el hondureño Leonidas Rosa Bautista, siguiendo el artículo 6 del reglamento, que indica que ante la ausencia del presidente del Consejo Permanente, el embajador más antiguo asumir interinamente la presidencia.
Los 20 países que el viernes pidieron la sesión extraordinaria se reunieron en la sede de la OEA, en Washington, varios de ellos defendieron el derecho del Consejo a efectuar la reunión, ante las reiteradas protestas de Venezuela y Bolivia, que la calificaron de “ilegal” y de un “golpe de estado institucional”.
La OEA inició su reunión 48 horas después de que el Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela suprimiera el sábado las acciones con las que había retirado sus poderes a la Asamblea Nacional.
El embajador hondureño dio la palabra en primera instancia a la canciller de Argentina, Susana Malcorra, quien trajo consigo y repartió en la sesión la resolución el sábado del MERCOSUR, el cual decidió aplicar la Cláusula Democrática a Venezuela por las decisiones tomadas la semana pasada por el Tribunal Supremo de Justicia venezolano que violaron el orden constitucional en ese país.
Malcorra acudió ayer lunes a la OEA como presidenta “pro tempore” del Mercosur. En su declaración, explicó que en Venezuela hay una “ruptura del orden constitucional” y una “intromisión sistemática” por parte del Tribunal Supremo en el Parlamento.
La canciller denunció la “ausencia de una real separación de poderes en Venezuela” y pidió al Gobierno de Nicolás Maduro que cumpla “el cronograma electoral” y “libere a los presos políticos”.
Malcorra remarcó que la preocupación de los países del Mercosur por la situación en Venezuela no es “en ningún sentido injerencista”.
El embajador de Bolivia, Diego Pary, que ostenta la presidencia de turno del Consejo Permanente, llegó después que la sesión había empezado y lamentó que “un país amigo” (Honduras) asuma “de manera golpista” e “ilegal” la presidencia del Consejo” y dijo que “no acepta de ninguna manera” que esa facultad le sea “usurpada”.
Pary, que preside el Consejo desde el sábado y durante los próximos tres meses, abandonó la sala visiblemente enojado después de su intervención.
El representante de Venezuela, Samuel Moncada, viceministro venezolano para América del Norte, habló en nombre de su país y reprochó a los embajadores presentes diciendo que “se ha cometido una grosera violación de la Carta (de la OEA) cuando vemos a la canciller argentina refiriéndose a Venezuela sin nuestro permiso”.
Moncada alegó que tras la decisión del TSJ de revertir las decisiones sobre la Asamblea Nacional “el objeto de esta discusión desapareció. Aquí (en la OEA) hay un forjamiento del objeto de la discusión”. El representante venezolano también se retiró de la sala en “señal de protesta”, junto con el embajador nicaragüense Luis Alvarado.
La resolución aprobada por la OEA, resuelve instar al gobierno de Venezuela a actuar en los próximos días para garantizar la separación e independencia de los poderes constitucionales y restaurar la plena autoridad de la Asamblea Nacional.
Mantenerse dispuesto a apoyar las medidas que permitan el retorno al orden democrático a través del ejercicio efectivo de la democracia y el estado de derecho en el marco constitucional de Venezuela.
Y, seguir ocupándose de la situación en Venezuela y emprender, en la medida que sea necesario las gestiones diplomáticas adicionales para fomentar la normalización de la institucionalidad democrática, de conformidad con la Carta de la Organización de los Estados Americanos y la Carta Democrática Interamericana, incluyendo la convocatoria de una reunión a nivel ministerial.
Estados Unidos reiteró su compromiso de trabajar con los demás miembros de la Organización de Estados Americanos y calificó la resolución como “un buen primer paso” para restablecer la democracia y el orden constitucional en Venezuela.
El representante de Washington pidió al gobierno de Venezuela asociarse a un diálogo constructivo con el resto de los países de la organización regional.
Gobierno de venezuela responde
Desde Caracas, Venezuela, la cancillería de ese país denunció este lunes la “destrucción” de la OEA, al rechazar una sesión del Consejo Permanente del organismo que declaró una “grave alteración inconstitucional del orden democrático” en el país.
“Venezuela denuncia (…) un hecho sin precedentes dirigido a la destrucción de la Organización de Estados Americanos (OEA), mediante el cual un grupo de gobiernos en complicidad con la Secretaría General, han perpetrado la toma de la Presidencia del Consejo Permanente para imponer a la organización y a los demás estados miembros su propia agenda ilícita”, señaló la cancillería venezolana en un comunicado.
Constituye una grave alteración del orden institucional de la OEA”, agregó el texto, que no se refiere concretamente a la resolución.
El pronunciamiento del organismo interamericano fue aprobado en una sesión de urgencia convocada por una veintena de países, de la cual Venezuela, Bolivia y Nicaragua se ausentaron en protesta.
El Ministerio de Exteriores aseguró que un grupo de gobiernos, “en complicidad con la Secretaría General” de ese organismo, “han perpetrado la toma de la Presidencia del Consejo Permanente para imponer a la organización y a los demás estados miembros su propia agenda ilícita”.