En los últimos meses han aumentado las víctimas procedentes del ambiente artístico.
Los cinco miembros del grupo Los Juniors de Monterrey y su chofer fueron encontrados con vida este martes, luego de que sus familiares los hubieran reportado como desaparecidos, en un caso que encendió las alarmas en México por el aumento de casos de artistas que han sido víctimas de amenazas, secuestrados o asesinados por parte de organizaciones del crimen organizado.
“Los jóvenes del grupo Los Juniors de Monterrey están bien y con sus familias”, afirmó el gobernador de Nuevo León, Samuel García, aunque no ofreció más detalles.
Esta mañana, el diario La Jornada reportó que los músicos y el conductor habían desaparecido la víspera en General Terán, un municipio del estado de Nuevo León, ubicado en el norte de México y fronterizo con EE.UU., mientras viajaban a una presentación.
Según los testimonios de sus familiares, la última vez que tuvieron contacto con los artistas fue a través de mensajes en las redes sociales, donde mencionaron una supuesta falla en el vehículo en el que viajaban.
Los miembros de Los Juniors de Monterrey, que interpretan música norteña, son Francisco Gabriel Alfaro, de 18 años; Luis Neftalí Domínguez y Abraham Ontiveros (23), Oscar Ulises Pérez (24) y Leonardo Rubio (33). El chofer que desapareció con ellos es Lorenzo Antonio Martínez (40).
Representantes de la música regional mexicana enfrentan una serie de presiones que incluyen amenazas del crimen organizado y los asesinatos de sus miembros en un país donde, según datos oficiales, se registran más de 128.000 personas desaparecidas.
A principios de junio, Julio Eusebio Labra, cantante del grupo Conquistadores de la Sierra, fue asesinado en pleno concierto en una sala del estado de Morelos. Unos días antes, se encontraron los cuerpos de Francisco Vázquez Osorio, Víctor Garza Cervantes, Nemesio Durán Rodríguez y Francisco Morales Martínez, integrantes del Grupo Fugitivo, así como de su representante, Livan Solís de la Rosa.