El objetivo de esta medida prevista para finales de mayo es poner a prueba los medios de Washington a la hora de responder a la amenaza de posibles lanzamientos de misiles norcoreanos
El Pentágono realizará a finales de este mes de mayo dos grandes pruebas de defensa antimisiles sobre el océano Pacífico destinadas a medir la capacidad de intercepción de misiles norcoreanos, informa la CNN citando fuentes militares estadounidenses.
Las pruebas forman parte del programa de las fuerzas armadas estadounidenses del sistema de defensa contra misiles balísticos ante las posibles amenazas de Corea del Norte o Irán. Las de este mes están destinadas de forma concreta a garantizar que Washington se defienda a sí mismo y a sus aliados de posibles lanzamientos de misiles balísticos intercontinentales realizados por Pionyang.
Una de estas actividades será la prueba de los mejorados misiles Standard Missile desde los buques de la Armada de EE.UU. en el Pacífico, precisó un oficial de la Defensa. Hasta ahora los Standard, que contienen una ojiva mejorada, habían sido puestos a prueba una sola vez. Las actualizaciones implican que este misil contará a partir de ahora con mayor alcance, supuestamente podrá ser lanzadosa más distancia de la costa de Corea del Norte, y tendrá más capacidad para derribar otros proyectiles.
El programa, que Washington viene desarrolland desde hace una década junto a Japón, tiene como fin asegurar la posibilidad de derribar los misiles norcoreanos de alcance intermedio. En este período solo la mitad de las pruebas ha sido exitosa, según precisa el Departamento de Defensa de EE.UU. Las nuevas maniobras se realizarán desde una base en California y una de ellas será interceptar un misil simulado sobre el océano Pacífico.
Con todo, un oficial precisó que EE.UU. no ha anticipado ninguna acción militar preventiva contra Pionyang y que solo se interceptarán misiles de Pionyang si la trayectoria de estos amenaza a Corea del Sur, Japón o al mismo EE.UU.
En este sentido, el secretario de Defensa de EE.UU., James Mattis, ordenó al Pentágono revisar su programa nuclear. La asistente de este para asuntos de Asia y el Pacífico Susan Thornton aseguró que EE.UU. “no tolerará” las amenazas de Corea del Norte, con lo que no está dispuesto a permitir que se siga comportando de manera “provocadora” y responderá a cualquier provocación o ataque “de manera apropiada”.