Darling Arrieta, hermana del cirujano colombiano descuartizado en Tailandia, recibió el mensaje el 4 de agosto, pero no pudo verificar el número hasta su llegada a España
El padre del descuartizador confeso Daniel Sancho no tardó en transmitir su pésame a la familia del cirujano colombiano asesinado en Tailandia, tras conocerse el crimen. El actor español Rodolfo Sancho envió por WhatsApp un mensaje a la hermana de Edwin Arrieta, Darling, en el que subrayó que “no hay disculpa ni perdón para lo que hizo” su hijo.
Darling Arrieta, quien esta semana concedió en España una entrevista exclusiva al programa ‘Mañaneros‘, de La 1, confirmó este jueves que el 4 de agosto recibió un mensaje de un número español desconocido. “Yo no sabía si efectivamente había sido el señor Rodolfo. Ya estando aquí, en España, se ha verificado”, aclaró.
“Hola Darling, soy Rodolfo Sancho, padre de Daniel Sancho. Lo primero, quiero darte mi más sentido pésame, a ti y a toda tu familia. Mi alma está con vosotros, no tengo palabras para expresar el horror que siento con esta situación y no puedo ni imaginar lo que estaréis sintiendo vosotros”, leyó Arrieta al inicio de la carta.
“No sabes cuánto lo siento, estoy destrozado”, continuaba el mensaje. “Es obvio que mi hijo tuvo algún tipo de brote psicótico o que tenía alguna enfermedad mental que nunca había aflorado, pero, sin duda, no hay disculpa ni perdón para lo que ha hecho”, agregó.
Rodolfo Sancho explicó que prefirió escribir en lugar de llamar “por miedo a que no fuera el mejor momento”, y agregó que se podía contactar con él a través de aquel número si se quería hablar. “Estoy destrozado y con el corazón roto. Espero que tarde o temprano encontréis la paz en vuestros corazones, yo no sé si volveré a encontrarla. De nuevo, mi más sentido pésame a toda su familia. Estoy sin palabras. Quedo a su disposición. Un saludo, R.S.”, concluía el mensaje.
“Nos han puesto por el suelo, a mi hermano, a mi familia”
Durante la entrevista del martes, Darling Arrieta cargó contra los medios españoles, sin especificar a cuáles se refería en concreto, que difundieron materiales sobre supuestos vínculos de su difunto hermano con la mafia y el narcotráfico. Darling insistió en que Edwin era “la luz” y “un hombre noble, de un corazón generoso“. “Como hermano, como hijo, como tío, como amigo, era una persona muy creyente“, relató.
“Nos han puesto por el suelo, a mi hermano, a mi familia”, lamentó Darling, confesando que lo que más le dolió fue que se dijera que Edwin “era narco, que era diabólico, peligrosísimo, que él tenía a esta persona [Daniel Sancho] secuestrada, amenazada“, cuando en su familia todos son “personas sencillas, personas con valores”.
“A la final, no se han puesto a mirar que es una familia destrozada, son unos padres a los que les quitaron a su hijo”, enfatizó, denunciando que “no respetan la memoria de una persona que está muerta“. “¿No quieren hablar bien de mi hermano?, no hablen, es que nadie les dice que hablen bien de mi hermano, pero, por favor, tampoco hablen lo que no saben. Respeten. Respeten a mi familia, respeten el nombre de mi hermano“, exigió.
Al hablar sobre los padres del asesino confeso, Darling se mostró dispuesta a recibirlos en Colombia: “Si ellos quieren ir a Lorica, quieren ir a mi casa, nosotros los recibimos, no tenemos ningún problema con eso”. “Nosotros no tenemos nada en contra de su mamá, nada en contra de su papá, porque igual son unos padres que están sufriendo“, reconoció.
Sin embargo, a diferencia de lo que ocurre con su propia familia, los padres de Daniel Sancho aún pueden ver a su hijo, recalcó. “Ellos, así sea por detrás de una cabina, teléfono, pueden escuchar la voz de su hijo. Mis padres no”, subrayó la hermana del colombiano descuartizado.
Lo único que quiere Darling Arrieta ahora es que el crimen de su hermano “no quede impune y que esa pena se pague en Tailandia“, donde fue cometido. “No se cometió en España, se cometió en Tailandia y debe ser juzgado en Tailandia, de acuerdo a las leyes tailandesas“, declaró, confiando en la justicia del país asiático.