Daniel Ortega asume la presidencia de Nicaragua por cuarta vez, ahora con su esposa como vicepresidenta.
El presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, asumió el martes su cuarto mandato y el tercero consecutivo desde 2007.
En esta oportunidad, su esposa, Rosario Murillo, será posesionada por primera vez como vicepresidenta, aunque ya ejercía el poder junto a su marido desde mucho antes.
En Nicaragua rige la reelección indefinida y, según medios locales, los poderes, incluido el electoral, están controlados por Ortega, a tal punto que antes de los comicios de este año fue anulada la participación de la oposición.
Ortega, de 71 años, y su esposa, de 65 años, ganaron ampliamente las elecciones del 6 de noviembre, obteniendo el 71,5 % de los votos, mientras que su partido, el Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), obtuvo 70 de los 90 escaños legislativos en disputa.
Ortega ya había dirigido el país entre 1979 y 1990, como el líder de la revolución sandinista que sacó del poder a la dictadura de Somoza, primero como coordinador de la Junta de Gobierno de Reconstrucción Nacional y luego como presidente.
En 2007 volvió al poder para quedarse, porque desde entonces no pierde las elecciones y puede postular de por vida.
El presidente de Bolivia, Evo Morales, asiste el martes a la posesión de quien considera su socio político porque ambos forman parte de la Alternativa Bolivariana para las Américas (ALBA), un mecanismo de integración de carácter político que fue creado por el fallecido Hugo Chávez.