Ayer se realizó la sesión extraordinaria del Consejo Permanente de la Organización de los Estados Americanos (OEA), donde se discutió lo que acontece en Venezuela, aprobándose la orden del día con al menos 20 votos a favor.
Durante la votación 11 naciones rechazaron el debate, dos se abstuvieron y uno estaba ausente para decidir.
Al menos se requerían 18 votos, pero hubo 20, ya que Belice y Guyana se sumaron a los 18 países que habían solicitado la sesión: Canadá, Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Estados Unidos, Guatemala, Honduras, México, Panamá, Paraguay, Perú, Uruguay, Barbados, Bahamas, Santa Lucía y Jamaica.
Por su parte el embajador representante de Venezuela ante la OEA, Samuel Moncada, dijo que en esta reunión se hablará de la situación del país sin el consentimiento del mismo. “Se viola la normativa de la carta de esta organización, el artículo primero, nada en esta carta puede obligar a un Estado parte a que sea intervenido en sus propios asuntos”, agrega.
Este Consejo Permanente se lleva a cabo con base al Art. 37 del reglamento del Consejo Permanente, señalando que cualquier Estado miembro puede solicitar esta sesión avisando el propósito de este pedido.
En cuanto al representante alterno de Nicaragua en la Organización de Estados Americanos, OEA, Luis Exequiel Alvarado Ramírez, apoyó al de Nicolás Maduro, ante el fogoso debate dentro del Consejo Permanente de la OEA que analizó la situación en ese país sudamericano.
Nicaragua y Bolivia apoyaron a Venezuela
Venezuela obtuvo el apoyo de Nicaragua y Bolivia. Ahora la OEA analizará qué medidas tomar para presionar a Maduro establecer un calendario electoral, además que deje libre a los presos políticos.
“Nicaragua ratifica su respaldo fraternal e incondicional a Venezuela, al gobierno del presidente Nicolás Maduro Moros”, agregado el delegado sandinista que tidló la cita de un “linchamiento político” y de promover “acciones desestabilizadoras” contra el país sudamericano.
“Traer al Consejo Permanente los problemas internos de un país es una violación a los acuerdos” de la OEA y Naciones Unidas que “viola la soberanía de Venezuela, porque esta reunión se hace a espaldas de Venezuela”, dijo.
“Nicaragua reclama cese de la represión contra ese país. No puede ser tomado en cuenta y no tiene validez, reclama la suspensión inmediata de esta reunión”, aunque al final sus palabras no fueron escuchadas.