Militares de EEUU han sido avisados de potenciales amenazas terroristas contra las instalaciones del Comando de EEUU en Europa (EUCOM) y de su personal.
WASHINGTON — Las bases y el personal militar de Estados Unidos en todo Europa están en alerta máxima, luego de nueva información de inteligencia que advirtió sobre un posible ataque terrorista contra instalaciones o su personal.
Un funcionario de defensa estadounidense confirmó este lunes a la Voz de América que las instalaciones militares en todo el Comando Europeo de EEUU, conocido como EUCOM, han sido elevadas a la Condición de Protección de la Fuerza “Charlie”, lo que significa que es probable que se produzca un ataque de algún tipo.
El funcionario no dio más detalles sobre el contenido de la información de inteligencia, pero aunque funcionarios antiterroristas de varios países han advertido sobre una mayor amenaza, incluidas algunas en torno a los próximos Juegos Olímpicos de Verano en París.
Una declaración del lunes de EUCOM indicó que el aumento de las medidas de seguridad es el resultado de una combinación de factores.
“Nuestro aumento de la vigilancia no está relacionado con una sola amenaza, sino por la preocupación por una combinación de factores como los grandes foros públicos en curso y futuros, incluida la Eurocopa y los Juegos Olímpicos, junto con una creciente amenaza de ataques por parte de actores y personas potencialmente malas, contra varios objetivos no militares en Europa”, dijo el comunicado.
EUCOM “aconseja al personal en el teatro europeo que permanezca vigilante y alerta en todo momento, lo que incluye informar actividades sospechosas, monitorear los avisos de viaje del Departamento de Estado e implementar medidas prudentes de mitigación de riesgos personales”, agregó.
El funcionario de defensa estadounidense dijo por separado que el ejército está “tomando medidas adicionales para garantizar que [las tropas de Estados Unidos] permanezcan alerta durante las actividades tanto de negocios como de placer”.
Un informe publicado el mes pasado por la firma de ciberseguridad Recorded Future advirtió que a pesar del alto riesgo de ataques cibernéticos, la mayor amenaza para los Juegos Olímpicos de París sigue siendo la posibilidad de ataques terroristas.
Las autoridades francesas ya han desbaratado al menos dos complots terroristas distintos. En uno de los casos, el sospechoso de 18 años fue acusado de planear un ataque en nombre del Estado Islámico (ISIS) contra uno de los estadios que sirven como sedes olímpicas.
Altos funcionarios antiterroristas de Estados Unidos también han reconocido que el grupo terrorista Estado Islámico (EI) o ISIS, también ha estado ganando impulso en los últimos meses.
Gran parte de la preocupación se ha centrado en la filial afgana del grupo, conocida como ISIS-Jorasán.
“Tanto ISIS como ISIS-Jorasán han demostrado capacidad e intención de llevar a cabo operaciones externas”, dijo la asesora adjunta de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Jen Daskal, en una conferencia antiterrorista en Omaha, Nebraska, la semana pasada.
La directora del Centro Nacional de Contraterrorismo, Christine Abizaid, también advirtió sobre el ISIS-Jorasán en mayo pasado.
“Esta capacidad de la empresa global ISIS, incluso sin solidez territorial, la capacidad de llegar virtualmente a una red de partidarios, algunos de los cuales van a realizar ataques, es bastante preocupante”, dijo en una conferencia de seguridad en Doha.
Abizaid calificó además la capacidad de ISIS-Jorasán para restablecerse en Afganistán como “probablemente la capacidad adicional más significativa que hemos visto en la red global de ISIS en los últimos tres años”.
ISIS-Jorasán se atribuyó la responsabilidad del ataque de enero contra un servicio conmemorativo en Kerman, Irán, que mató a unas 90 personas, y también del ataque de marzo a una sala de conciertos de Moscú que mató a más de 140 personas.
Los funcionarios antiterroristas estadounidenses también han expresado su preocupación de que ISIS-Jorasán se haya vuelto más hábil en el uso de redes criminales transnacionales y redes de tráfico de personas, observando posibles complots para enviar a sus agentes a Estados Unidos.