En medio de estrictas medidas de seguridad, el secretario de Seguridad Nacional de Estados Unidos, John Kelly, se reunió el miércoles con el presidente guatemalteco, Jimmy Morales, para tratar temas de cooperación, seguridad y migración en el marco de una visita de dos días al país centroamericano.
En su visita Kelly también tenía previsto un encuentro con el canciller guatemalteco, Carlos Raúl Morales, y el ministro de Gobernación, Francisco Rivas.
La reunión con Morales fue privada y ningún periodista pudo ingresar al Palacio Nacional.
La tarde del miércoles Kelly tiene previsto visitar el lugar adonde llegan los migrantes guatemaltecos que son deportados desde Estados Unidos.
La reunión se da un día después de que se anunciara una redefinición radical de las prioridades en la aplicación de las leyes migratorias estadounidenses, de acuerdo con varios memorandos firmados por Kelly.
Los nuevos parámetros incluyen la deportación de personas que fueron arrestadas por faltas menores como violaciones de tránsito y de cualquier inmigrante que vive en el país de manera ilegal y está acusado de cualquier delito incluso sin haber siquiera pasado de ser sospechoso.
En Estados Unidos viven unos dos millones de guatemaltecos, especialmente en California, Nueva York, Texas y Florida, de los cuales más de 95 % envía remesas que ascienden a unos 7.273 millones de dólares anuales. Según una encuesta de la Organización Internacional para las Migraciones 91% ha emigrado por motivos económicos.
El jueves Kelly junto a Rex Tillerson, secretario de Estado estadounidense, se reunirán en México con autoridades de ese país para tratar los mismos temas en medio de una tensa relación entre ambos gobiernos luego de que el presidente Donald Trump iniciara su gobierno con una agresiva política anti-inmigrante y la intención de construir un muro entre los dos países.