El presidente Donald Trump firmó ayer lunes una nueva orden de restricción de viajes a Estados Unidos por la cual se suspende durante tres meses la entrada a personas de seis países de mayoría musulmana que soliciten visas nuevas, y por cuatro meses a todos los refugiados.
La nueva orden, que entrará en vigencia el próximo 16 de marzo, fue presentada por los secretarios de Estado, Rex Tillerson, de Seguridad Interior, John Kelly, y el de Justicia, Jeff Sessions poco después que la orden fue firmada por el presidente en la Casa Blanca, donde no hubo acceso para la prensa.
“Esta orden revisada va a fortalecer la seguridad de Estados Unidos y nuestros aliados”, dijo Tillerson en breves palabras de presentación.
La nueva directiva pretende abordar cuestiones legales que surgieron de la orden ejecutiva original, que fue bloqueada en los tribunales aunque su objetivo será el mismo: Impedir la entrada a Estados Unidos a potenciales terroristas mientras el gobierno evalúa el sistema de revisión para refugiados y solicitantes de visa de ciertas partes del mundo.
El secretario Sessions subrayó que “ésta como la primera [orden] es una orden legal del poder ejecutivo”.
De acuerdo a la nueva orden, los viajeros de Sudán, Siria, Irán, Libia, Somalia y Yemen que no tengan visas válidas actualmente no podrán viajar a Estados Unidos durante los próximos 90 días.
El secretario Sessions dijo que “tres de estos estados son naciones patrocinadoras de terrorismo y los otros tres son santuarios. Esto aumenta el riesgo de que gente que sea admitida pertenezcan a grupos terroristas o hayan sido radicalizados por ellos”.
Pero Iraq, que estaba originalmente en la lista de países prohibidos, fue retirado de la orden original después de acordar aumentar su cooperación con el gobierno estadounidense para la investigación de sus ciudadanos que soliciten una visa de viaje.
El Pentágono y el Departamento de Estado urgieron a la Casa Blanca a reconsiderar la restricción a Irak dado el papel crucial de Bagdad en el combate contra el grupo Estado Islámico.
“Irak es un importante aliado en la lucha contra ISIS”, remarcó Tillerson.
El nuevo decreto corregido también suspende el programa de refugiados del país durante cuatro meses, pero ya no se enfoca específicamente en los refugiados sirios para una prohibición indefinida y deja en claro que todas las visas ya existentes serán respetadas.
Excepciones
Entre los excluidos en las nuevas restricciones están los residentes de Estados Unidos que tienen Tarjeta Verde, ciudadanos con doble nacionalidad que estén usando pasaportes de países que no son afectados; personas con visas válidas de EE.UU. u otros documentos de viaje, personas con pasaportes diplomáticos o similares, personas que han recibido asilo.
Adicionalmente, funcionarios consulares pueden hacer otras excepciones caso por caso para individuos con conexiones de negocios, estudios o familiares en este país. También son excluidos individuos que ya se encuentran en EE.UU.
Demandas presentadas
El decreto presidencial anterior fue bloqueado por una corte federal y ocasionó confusión y enojo mientras algunos viajeros eran detenidos en aeropuertos estadounidenses, incluyendo residentes legales permanentes tenedores de la tarjeta verde, y a otros se les prohibía en el extranjero abordar vuelos hacia Estados Unidos.
Más de dos docenas de demandas fueron presentadas ante tribunales estadounidenses contra la prohibición, pero fue un Tribunal de Apelaciones del Noveno Circuito de Estados Unidos, quien suspendió la orden ejecutiva del presidente, basado en un caso presentado por el estado de Washington.