Las oleadas de calor marinas se han vuelto dos veces más frecuentes desde hace cuatro décadas, y para el año 2100 podrían ser 10 veces más intensas que a principios del siglo XX, advierten los expertos
La temperatura superficial promedio del océano, excluyendo las regiones polares, subió por primera vez hasta los 20,96 grados centígrados, según datos del Observatorio Climático de la Unión Europea, citados por AFP. Este es el resultado de que las aguas de todo el mundo hayan absorbido 90 % del exceso de calor producido por los humanos desde los comienzos de la era industrial, advierten los científicos.
La cifra actualizada es una centésima mayor que el récord anterior, registrado en marzo de 2016, cuando la temperatura del océano era de 20,95 grados centígrados, declaró una portavoz del Servicio de Cambio Climático Copérnico, de la UE.
Además, desde abril la temperatura media de los océanos viene superando con regularidad los récords estacionales de calor. Este exceso sigue acumulándose a medida que los gases de efecto invernadero continúan aumentando su presencia en la atmósfera terrestre, explican los expertos.
“Aunque es cierto que hay factores a corto plazo, la principal causa a largo plazo es sin duda la acumulación de gases de efecto invernadero en la atmósfera, provocada por la actividad humana y principalmente por la quema de combustibles fósiles“, afirmó el director de investigación climática de la Universidad de Reading, Rowan Sutton.
Las aguas más cálidas son menos capaces de absorber dióxido de carbono, lo que empeora el círculo vicioso del calentamiento global. Se teme, además, que temperaturas aún más altas estén probablemente por llegar debido al fenómeno de El Niño, cuyos efectos se sentirán en particular a finales de 2023.
Según un informe de 2019 del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático, las oleadas de calor marinas se han vuelto dos veces más frecuentes desde hace cuatro décadas, y para 2100 podrían ser 10 veces más intensas que a principios del siglo XX, si no se reducen las emisiones contaminantes.
Prueba de ello es que últimamente se han registrado una serie de máximos históricos en todo el mundo, tales como una temperatura de 38,3 grados centígrados en la costa de Florida (EE.UU.) o una media de 28,71 grados centígrados en el mar Mediterráneo, según el principal centro de investigación marítima de España.
Los científicos alertan de que el sobrecalentamiento de los océanos, entre otros impactos, tendrá efectos sobre la vida animal y vegetal marina, como la migración de determinadas especies y la propagación de especies invasoras, lo que podría amenazar las poblaciones de peces y, por tanto, socavar la seguridad alimentaria en ciertas partes del planeta.