El periodista Aníbal Toruño ha denunciado en múltiples ocasiones la persecución a que lo somete el gobierno de Nicaragua desde que se produjeron las protestas masivas de 2018
Por segunda ocasión en menos de una semana agentes de la policía nicaragüense, señalada de ser una de las instituciones más fieles al presidente Daniel Ortega, allanaron sin ninguna orden judicial la vivienda del periodista y director de Radio Darío, Aníbal Toruño, ubicada a unos 70 kilómetros al norte de la capital, según denuncia el comunicador.
Toruño, quien se había exiliado durante varios meses denunciando constante asedio y persecución del gobierno por dirigir una emisora crítica al mandatario sandinista, explicó a la Voz de América que los agentes se personaron en su domicilio la mañana del jueves en el marco un operativo antinarcótico.
“Nuevamente policías armados con técnica narcótica están allanando la casa. Ahí tengo familiares adentro. Hago responsable a Daniel Ortega y al gobierno de Nicaragua por las consecuencias que se puedan dar. Es una violación a todos los derechos humanos”, denunció el periodista.
El pasado 4 de enero fue realizado un operativo similar en la casa del periodista, asegura, el cual era dirigido por el jefe policial Fidel Dominguez, sancionado recientemente por el gobierno de Estados Unidos precisamente por haber dirigido ataques contra muchos ciudadanos y reporteros nicaragüenses.
“Buscaban drogas y preguntaban por mi cuarto, dónde era mi cuarto y dónde estaba yo. Y que supuestamente estaba ligado al tráfico de drogas y que me estaban buscando«, dijo Toruño en ese entonces.
Solidaridad con el reportero
Varios organismos de derechos humanos como la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas expresaron “su profunda preocupación por el allanamiento policial”. “Reiteramos que es imperativo asegurar la libertad de expresión en Nicaragua”, sentenció OACNUDH en Twitter.
Mientras que el Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh) calificó como “perversas políticas represivas del régimen de Daniel Ortega”, el allanamiento policial.
“Denunciar las violaciones a los derechos humanos le ha costado a Toruño la quema y destrucción total de las instalaciones de la radio, el exilio forzado y la persecución” señaló el Cenidh.
Iglesia pide poner fin a persecución de periodistas
El allanamiento en la vivienda de Toruño coincide con un comunicado publicado el 6 de enero por la Iglesia Católica de Nicaragua, en el que llamó a poner fin a la persecución a periodistas que son hostigados y asediados por agentes policiales.
“Fijemos nuestra mirada en Cristo para que se ponga término a las torturas, la persecución a periodistas, el hostigamiento a las familias de los presos políticos injustamente detenidos; actos que intentan justificarse promulgando leyes injustas e inmorales”, dijo la iglesia.
Anibal Toruño es uno de los periodistas que más ha sido asediado desde las protestas contra el gobierno del presidente Daniel Ortega en abril de 2018.
Su emisora Radio Darío, ubicada en la ciudad de León, uno de los bastiones del sandinismo, fue quemada días después del estallido social.
El medio de comunicación sigue operando en una casa particular y sus reporteros denuncian frecuentemente la persecución por parte de civiles armados, así como agentes policiales que se colocan en las afueras del lugar.
Escrito por Houston Castillo, Voz de América