Trump ha vuelto a azuzar el fantasma del fraude electoral en medio del foco mediático del recuento de votos solicitado por el Partido Verde en Wisconsin y Pensilvania, al que añadirá Michigan antes del miércoles.
La Casa Blanca dijo que no hay pruebas que sustenten el supuesto “fraude electoral” que denuncia el presidente electo, Donald Trump, quien el domingo dijo que “millones de personas votaron ilegalmente” en los comicios del 8 de noviembre.
“Creo que lo que puedo decir es un hecho objetivo, que no ha habido ninguna prueba que sostenga una afirmación como esa”, indicó hoy el portavoz de la Casa Blanca, Josh Earnest.
Preguntado por las reclamaciones de Trump, el portavoz remitió al equipo del presidente electo para comentarios sobre los mensajes de Twitter con los que el domingo el magnate volvió a cuestionar el sistema electoral estadounidense.
“Para una reacción o explicación, les referiría al equipo del presidente electo”, zanjó Earnest.
Trump ha vuelto a azuzar el fantasma del fraude electoral en medio del foco mediático del recuento de votos solicitado por el Partido Verde en Wisconsin y Pensilvania, al que añadirá Michigan antes del miércoles.
Su equipo de transición insistió en que hay pruebas de fraude electoral, después de que el domingo el magnate denunciara que “millones de personas votaron ilegalmente” en las elecciones del 8 de noviembre.
La reacción de Trump respondía al anuncio de la campaña de la excandidata demócrata Hillary Clinton de que se sumaría a la petición de recuento de votos impulsada por el Partido Verde.
El portavoz de su equipo de transición, Jason Miller, consideró hoy en una llamada con periodistas que “es ridículo” que los medios “den tanto oxígeno” a un recuento “donde no hay ninguna oportunidad de alterar el resultado electoral”.