Una vez que estén instalados los 100 módulos que integran el centro de datos, la potencia de procesamiento total será igual a la de 6 millones de computadoras personales trabajando simultáneamente
China comenzó la construcción del primer centro de datos submarinos comercial del mundo frente a la costa de la ciudad de Sanya, ubicada en la provincia china de Hainan, informaron este martes medios estatales.
Este ambicioso proyecto podría tener un impacto significativo en el futuro de la sostenibilidad digital, ya que supone un gran ahorro en términos de terreno y consumo eléctrico, al aprovechar su ubicación en las profundidades del océano.
Las empresas involucradas en la planificación del centro de datos instalaron el primer módulo de almacenamiento en abril de este año, a 35 metros de la superficie. El pasado viernes, se colocó el segundo.
Según medios estatales, estas unidades están diseñadas para resistir las condiciones del fondo marino, por lo que pueden tener una vida útil de hasta 25 años antes de tener que ser reemplazadas. Asimismo, mencionaron que cada una pesa alrededor 1.300 toneladas y tiene la capacidad de procesar más de cuatro millones de imágenes de alta definición en 30 segundos.
Una enorme potencia de procesamiento
Para 2025 se prevé la instalación de 100 módulos de almacenamiento, que ocuparán aproximadamente 68.000 metros cuadrados, un equivalente a casi 10 campos de fútbol. Así, se espera que la potencia de procesamiento total del centro de datos sea igual a la de 6 millones de computadoras personales funcionando simultáneamente.
Los centros de datos sumergidos pueden aprovechar el agua del mar para enfriar de manera natural los módulos de almacenamiento, ayudando a reducir costos operativos y recursos hídricos. Se estima un ahorro de 122 millones de kilovatios-hora de electricidad al año, así como de 105.000 toneladas de agua dulce.
De acuerdo con el portal Tom’s Hardware, la construcción del centro de datos tendrá un costo aproximado de 879 millones de dólares. Además, el sitio menciona que existen otros proyectos similares dispersos por el territorio chino, incluidas las regiones del delta de los ríos Yangtsé y Perla.