Además, los dos funcionarios debatieron sobre la reciente prueba de misiles balísticos de Corea del Norte y la importancia de “resolver el problema de los ciudadanos japoneses secuestrados” por Pionyang, según un comunicado de la Casa Blanca
La vicepresidenta de EE.UU., Kamala Harris, aterrizó en Tokio la mañana de este lunes en el marco de una visita a Asia en la que se reunirá con distintos funcionarios en Japón antes de viajar el jueves a Corea del Sur.
Harris encabeza una delegación de funcionarios estadounidenses que incluye al embajador de EE.UU. en Tokio, Rahm Emanuel, quienes representarán al país norteamericano el martes en el controvertido funeral de Estado del ex primer ministro japonés Shinzo Abe, asesinado el pasado 8 de julio mientras pronunciaba un discurso de campaña en la prefectura de Nara.
Poco después de su llegada a la capital nipona, Harris se reunió con el actual primer ministro del país, Fumio Kishida, en el Palacio de Akasaka.
“Discutieron las recientes provocaciones agresivas e irresponsables de la República Popular China en el estrecho de Taiwán y reafirmaron la importancia de preservar la paz y la estabilidad en el estrecho de Taiwán”, declaró la Casa Blanca en un comunicado.
Además, los dos funcionarios debatieron sobre la reciente prueba de misiles balísticos de Corea del Norte, así como sobre la importancia de “resolver el problema de los ciudadanos japoneses secuestrados” por Pionyang, señala el texto.
“La alianza entre Japón y EE.UU. es la piedra angular de la paz y estabilidad en la región del Indo-Pacífico”, dijo Harris a Kishida, al tiempo que calificó de “férreo” el compromiso de Washington con la defensa del país nipón.
El viaje marca la segunda visita de la vicepresidenta estadounidense a Asia desde que asumió el cargo en 2021.
Durante su estadía en Tokio, Harris sostendrá asimismo conversaciones con el primer ministro surcoreano, Han Duck-soo, y el primer ministro australiano, Anthony Albanese, que también acudirán al funeral de Abe. Además, tiene previsto visitar la base naval de Yokosuka, sede de la 7.ª Flota de EE.UU., para saludar a los miembros del servicio y recorrer un buque destructor de la Armada, dijo un funcionario de la Casa Blanca.
La visita de la vicepresidenta se produce después de que China “protestara” ante la promesa del presidente de EE.UU., Joe Biden, de que tropas estadounidenses defenderían Taiwán en caso de una invasión impulsada por Pekín.