Los retrasos en las entregas en medio de la crisis del mar Rojo podrían hacer subir la inflación mundial justo cuando los bancos centrales empiezan a señalar posibles recortes de los tipos de interés
La interrupción del tráfico en el mar Rojo afectará a las cadenas de suministro y podría elevar los precios de los productos finales, lo que contribuiría a la inflación, publica el portal de noticias sobre energía OilPrice.
La inflación y los elevados tipos de interés siguen siendo un gran motivo de preocupación, ya que las principales economías, que desafiaron las predicciones de recesión en 2023, podrían sufrir una recesión este año, según los expertos.
De este modo, el Banco Central Europeo (BCE) podría retrasar cualquier recorte de tipos este año hasta que vea una senda clara hacia una inflación del 2%, según manifestó la semana pasada Robert Holzmann, miembro del Consejo de Gobierno del BCE.
Sin embargo, estos recortes podrían retrasarse varios meses si las autoridades monetarias observan un aumento de la inflación. Europa puede ser especialmente vulnerable a la inflación, dado que el canal de Suez es su ruta comercial marítima clave desde Asia, señala la publicación.
“La interrupción del comercio marítimo provoca desajustes a corto plazo entre la oferta y la demanda, así como desequilibrios en la disponibilidad de buques, personal y contenedores vacíos, y es preciso volver a equilibrar esta situación”, afirma Rico Luman, economista sectorial senior en ING.
Esta semana se ha revelado que el coste medio mundial del envío de un contenedor de 40 pies (unos 3.750 kilogramos) aumentó un 23% en la semana del 18 de enero, hasta los 3.777 dólares. Esta cifra es más del doble de la del 21 de diciembre de 2023, cuando el coste era de 1.660 dólares.