Las once personas implicadas son acusadas de delitos de corrupción activa y pasiva, lavado de dinero, tráfico de influencias y asociación ilícita.
La Fiscalía brasileña ha presentado cargos por corrupción contra el expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva y diez personas más, informa el diario ‘O Globo’. Se les acusa de los delitos de corrupción activa y pasiva, lavado de dinero, tráfico de influencias y asociación ilícita.
Según la denuncia, Lula habría interferido entre 2008 y 2015 en las actividades del Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES) con el fin de asegurar la liberación de los fondos para una obra de la constructora brasileña Odebrecht en Angola. A cambio, Odebrecht habría pasado “de forma encubierta” a los involucrados valores de aproximadamente 9,3 millones de dólares.
“En el caso del expresidente, las penas máximas sumadas llegan por lo menos a 35 años de reclusión, además de multa”, ha precisado el comunicado del Ministerio Público Federal que inició la acción penal. Por su parte, Lula ha comunicado a través de su página de Facebook que penalizar una actividad como dar conferencias para empresas, algo que han hecho otros expresidentes, es “una persecución política”.
Lula ya está acusado de supuesta obstrucción de la justicia para impedir el avance de la Operación Lava Jato y por recibir un apartamento de la constructora OAS, también sometida a la investigación en la Lava Jato.