
Foto de futbolista jugando.
Un futbolista juvenil del equipo israelí Holon Yermiyahu fue suspendido por 99 años luego de que se involucrara en una segunda pelea violenta, informan medios locales.
El jugador, de 17 años, recibió la sentencia de un juez del tribunal de la Federación Israelí de Fútbol, quien determinó que su comportamiento violento no tiene cabida en el campo de juego. Anteriormente, el joven había agredido a puñetazos a un miembro de un equipo rival. En esa ocasión, fue suspendido por seis partidos y se le brindó una segunda oportunidad.
Sin embargo, tras la segunda agresión el juez concluyó que no había aprendido la lección y decidió imponerle la pena máxima, expulsándolo definitivamente. El club recibió una multa de 2.500 séqueles (poco más de 770 dólares) y una reducción de 3 puntos por cada reincidencia del equipo en faltas relacionadas con “disturbios, riña y agresión” durante un año.