Durante el interrogatorio afirmó que seguía las instrucciones de un libro donde había un conjuro “sobre la vida eterna” y próspera para uno mismo y sus familiares que requería el asesinato de un niño pequeño
La ciudad rusa de Narian-Mar, situada en la circunscripción autónoma de Nenets, en el noroeste del país, se ha visto sacudida por el asesinato de un menor. Denís Pozdéyev, de 36 años, ingresó este jueves en un jardín de infancia armado con un cuchillo y mató a un niño de seis años durante la siesta.
El hombre entró en la guardería sin impedimento alguno, subió a la primera planta y degolló a uno de los menores que estaban durmiendo. El hombre estaba borracho y, a juzgar por las conclusiones preliminares de las autoridades, parecía presentar problemas mentales.
Durante el interrogatorio afirmó que seguía las instrucciones de un libro donde había un conjuro “sobre la vida eterna” y próspera para uno mismo y sus familiares que requería el asesinato de un niño pequeño. El asesino explicó dónde lo había comprado y afirma que es consciente de que irá a la cárcel.
Según fuentes del portal Life, los guardias de seguridad tomaron al atacante por un padre o familiar de uno de los niños y le dejaron entrar. El menor falleció enseguida en el lugar de los hechos.
De acuerdo con los medios, el agresor estaba en tratamiento contra la drogadicción y alcoholismo y en el momento del ataque oía voces en la cabeza que le prometían la vida eterna a cambio de la vida de un niño. Padres de los niños que estaban en el mismo jardín de infancia afirmaron que el hombre estaba gritando “¡Satán! ¡Satán!” al entrar en el dormitorio.