“Humo Blanco” salió en los titulares de los diversos medios de comunicación nacional al conocerse el resultado del diálogo entre la Organización de los Estados Americanos (OEA) y el Gobierno de Nicaragua, tras los 90 días acordados antes de presentar una resolución.
Y es que el Secretaría General de la OEA “dará seguimiento de forma objetiva, imparcial y transparente, y con la capacidad técnica apropiada, a las elecciones municipales 2017 en el marco de la invitación del presidente Daniel Ortega a dar acompañamiento a las mismas para seguir fortaleciendo el proceso electoral y su institucionalidad”, dice el informe.
Además tanto el Estado de Nicaragua como la OEA, estarán ejerciendo labores para la “depuración del padrón electoral”, además para el próximo mes de febrero se firmará un memorándum de entendimiento para fortalecer las instituciones públicas.
Ortega gana bastante tiempo político con resolución de la OEA
“El mismo establecerá un plazo de tres años para desarrollar los trabajos y detallará las tareas específicas a llevar a cabo en materia de: seguimiento de las elecciones municipales de noviembre de 2017, continuación del proceso de perfeccionamiento del sistema de representación política y mecanismos que lo fortalezcan jurídicamente”, detalla el informe.
En octubre de 2016, el Gobierno de Nicaragua y la OEA dieron comienzo a una mesa de conversación e intercambio constructivo que se ha extendido durante tres meses.
La oposición política y organizaciones civiles tildaron las elecciones del pasado 6 de noviembre de 2016, como una “farsa electoral”.
Critican a Luis Almagro de la OEA
Julio Icaza, analista y exembajador alterno de Nicaragua ante la Organización de Naciones Unidas (ONU), dijo al diario La Prensa, “es evidente que el alcance de los acuerdos referidos en el informe es muy pobre y limitado, está dirigido fundamentalmente a ganar tiempo y pone en riesgo la credibilidad de la organización. Y así será visto por la mayoría de los gobiernos representados en el consejo permanente, que es el órgano político capacitado para valorarlos”, dice el experto.
Carlos Tünnermann, analista y miembro del Grupo de los 27, señaló duramente la posición de la OEA, al criticar que en este convenio firmado por Almagro “se acepta que OEA venga como acompañante” en los comicios municipales, cuando existe una figura en la Carta Democrática Interamericana y en la Ley Electoral nicaragüense conocida como la de observación electoral.
“Cuando se acuerda que una misión de la OEA va a dar seguimiento a un proceso electoral se firma un convenio con el Gobierno. Ojalá que cuando se firme ese convenio se respete lo que dice la Carta Democrática Interamericana de la observación electoral; dependerá entonces de lo que se ponga en ese convenio, que a esos acompañantes se les den las mismas garantías de los observadores electorales”, dijo Tünnermann.
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