
Según los medios polacos, uno de los aviones no tripulados de ataque unidireccionales rusos que entró en el espacio aéreo polaco anoche, golpeó una casa en el pueblo de Wyryki en el este de Polonia, dañando el techo y un vehículo que se encontraba en la propiedad, aunque no hubo heridos.
El Ministerio del Interior de Polonia ha informado el miércoles que una vivienda y un automóvil resultaron dañados momentos de la violación del espacio aéreo polaco por parte de Rusia en horas de la noche, y añadió que por el momento se han localizado al menos siete drones y restos de un proyectil desconocido.
“Hemos encontrado siete drones y restos de proyectiles… de origen desconocido”, declaró a la prensa la portavoz del Ministerio del Interior, Karolina Galecka, añadiendo que una vivienda y un automóvil también terminan dañados.
Las autoridades polacas han descubierto restos de un misil de origen desconocido y de siete drones tras la violación del espacio aéreo del país por parte de Rusia, informó la portavoz del Ministerio del Interior, Kinga Gałecka.
Galecka agregó que el misil del que se descubren los restos puede ser un misil polaco empleado para derribar los drones.
El primero de los restos se halló a las 05.30 GMT en Mniszków, (este), y desde entonces se han sucedido nuevos hallazgos de restos en varias zonas del país, incluyendo un dron en la provincia de Lódz (centro), a más de 300 kilómetros de la frontera bielorrusa.
El primer ministro polaco, Donald Tusk, reveló este miércoles en el Parlamento que, durante la madrugada, se registraron hasta 19 incursiones del espacio aéreo polaco, y destacó que, por primera vez desde el comienzo de la guerra rusa en Ucrania en febrero de 2022, los drones llegaron desde Bielorrusia.
Tusk explicó que se detectaron drones durante “toda a noche, desde aproximadamente las 23.30 hora local (21.30 GMT) del martes hasta las 06.30 (04.30 GMT) de hoy”.
Polonia envió dos cazas F-35, dos F-16 y helicópteros MI-24, MI-17 y Black Hawk para interceptar los drones, además de los aviones militares de Países Bajos e Italia que colaboraron en el operativo en coordinación con el Mando Aéreo de la OTAN.

Un dron de ataque ruso Gerbera penetró casi 300 km del espacio aéreo polaco y fue encontrado en la ciudad polaca de Mniszków, según RMF 24.
No se informa sobre víctimas ni heridos, pero una casa resultó dañada y también se reportaron perjuicios en un turismo aparcado, según la portavoz del Interior.
Las autoridades de Polonia siguen buscando más restos de drones derribados, con un llamamiento a la población para que informe de cualquier objeto extraño que encuentren.
Ante estas “violaciones sin precedentes” de su espacio aéreo, Polonia ha solicitado formalmente una consulta urgente de los aliados al haber invocado el Artículo 4 de la OTAN, una decisión conjunta de Tusk y el presidente polaco, Karol Nawrocki, para preparar una respuesta conjunta de los aliados.

Durante la noche, se registraron 19 incursiones en el espacio aéreo polaco, con un número significativo de drones volando desde Bielorrusia, según el primer ministro polaco, Tusk.
Aunque Tusk calificó la situación como “más cercana a un conflicto abierto que nunca desde la Segunda Guerra Mundial”, enfatizó que no hay motivos para afirmar que el país está en guerra.
El Mando Operativo de las Fuerzas Armadas ha comunicado que la situación de seguridad se ha estabilizado y los cuatro aeropuertos que se cerraron al tráfico de manera provisional operan ya con normalidad.