En los libros “Un Pueblo en Armas” e “Insurrección Sandinista Victoriosa y Repliegue Táctico de Managua a Masaya”, respectivamente del Comandante Carlos Núñez Téllez y de Pablo Emilio Barreto Pérez, se afirma que las causas esenciales o motivaciones militares, políticas y emotivas para efectuar el Repliegue Táctico o Retirada de Managua a Masaya, fueron, entre otras, las siguientes:
Falta o escasez de municiones, pocas armas de guerra (a pesar de que se les habían arrebatado muchas en combates a los guardias genocidas), cansancio evidente de los Combatientes Populares, desesperación y rabia por los bombardeos aéreos destructivos, frustración por no haber derrotado definitivamente al régimen de asesinos y ladrones en 17 días de combates en Managua, proceder a salvar con carácter estratégico a la masa de Combatientes Populares (hombres mujeres jóvenes, ancianos y niños) y a varios miles de pobladores civiles implicados en la Insurrección de Managua, necesidad urgente de reforzar la Liberación de la Ciudad de Masaya, necesidad también urgente de fortalecer militar y políticamente a los Frentes FSLN Oriental Carlos Roberto Huembes y Sur Benjamín Zeledón Rodríguez; emprender un movimiento estratégico potente, militarmente ofensivo, sin retroceso, descargando balas como un sunami indetenible y de frente, para terminar de liberar Diriamba, liberar totalmente a los llamados “Pueblos Blancos”, liberar la Ciudad de Jinotepe, capital caraceña; San Marcos y resto de pueblos de Carazo; y también liberar Diriomo, Diriá y la Ciudad Colonial de Granada. Esto último, la liberación de Granda, ocurrió el 17 de julio en la noche y el 18 de julio en la mañana, en víspera del 19 de julio.
“Esa tarde (27 de junio) reunimos a los jefes militares de los diferentes puntos de resistencia, los reunimos a todos y se habló con todos. Se les planteó la situación en general, el contexto de la guerra, de cómo estaba, se les analizó con claridad lo que ya habíamos logrado en Managua, la ac tividad extraordinaria de ellos, heroica y se les persuadió, se les planteó las condiciones de cómo estábamos y se les dijo que la decisión era irnos, de replegarnos”, explicó varios años, en una entrevista, el Comandante Joaquín Cuadra Lacayo, uno de los tres jefes del Frente Interno del FSLN. Cuadra Lacayo añadía: “Los jefes entendieron lo positivo de la medida, de la maniobra militar y eso ayudó enorme mente a rescatar y recuperar y a incrementar la confianza en la conducción hasta la victoria en Jinotepe, el 5 de julio de 1979”.
Esto está relatado ampliamente en varios artículos ubicados en mi página: pabloemiliobarreto.tk, en WordPress, en Internet. Se puede abrir a través de Google. Ya decidido el Repliegue Táctico de Managua a Masaya por la Dirección Nacional Conjunta y el Estado Mayor General del Frente Interno, los participantes en la Insurrección (Jefes Guerrilleros, Combatientes Populares, Colaboradores Históricos, Correos y miembros de los Comités de Defensa Civil), salieron de los siguientes vecindarios, a partir de las seis de la tarde, para concentrarse en la Calle de la Clínica Don Bosco al tope de la gasolinera San Rafael, en el Barrio Santa Bárbara, hoy Barrio Venezuela: Esos Barrios son, entre otros: Bello Horizonte (aquí estaba el 80 por ciento de los heridos), Santa Rosa, Costa Rica, Maestro Gabriel, Barrio Blandón, Santa Bárbara, Salvadorita (hoy Cristian Pérez Leiva), El Edén, Larreynaga, San José Oriental, Paraisito, Tenderí, “Campo Bruce” (hoy Rigoberto López Pérez), Colonia Managua, Riguero, Colonia Máximo Jerez, México, “La Luz” o “Rebusca” (hoy Barrio Catorce de Junio), El Dorado, Colonia Don Bosco, Colonia Colombia, San Cristóbal, María Auxiliadora, Ducualí (conocido como “Cuna de la Insurrección”), “Luis Somoza” (hoy Diez de Junio), Barrio Santa Julia, Colonia Nicarao, Colonia Managua, Colonia Catorce de Septiembre, el entonces naciente Barrio Omar Torrijos, “La Fuente” (hoy Ariel Darce), “Pablo Úbeda” (antes tenía otro nombre), Reparto Schick Gutiérrez, Reparto Urbina, Américas Uno, Tres y Cuatro; Barrio Santa Bárbara, Villa Progreso, Villa San Jacinto, Rubenia, Riguero Norte, Primavera, Unidad de Propósitos, Américas Dos (hoy Villa José Benito Escobar Pérez), Barrio Mombacho, Waspán Sur, Colonia Xolotlán, Villa San Jacinto, Berta Díaz, el hoy CAmilo Chamorro, Colonia Miguel Gutiérrez, Asentamiento Las Mangueras, y también participantes de vecindarios occidentales de Managua como: San Judas, Monseñor Lezcano, Acahualinca, Las Brisas, Linda Vista, Santa Ana, Altagracia, Lomas de Guadalupe.
El Estado Mayor del Frente Interno estimaba que irían unos 1,000 en el Repliegue. Sin embargo, en la Calle de la Clínica Don Bosco hacia el tope de la gasolinera San Rafael nos concentramos casi seis mil Combatientes Populares y civiles implicados en la Insurrección, incluyendo casi 200 heridos, unos llevados en camillas y otros auxiliados en muletas y apoyándose en otros Combatientes Populares. Asimismo, el estimado del Frente Interno del FSLN clandestino, jefeado por los Comandantes Carlos Núñez Téllez, William Ramírez Solórzano y Joaquín Cuadra Lacayo, era que el Repliegue saldría de Managua a las seis de la tarde del 27 y estaría llegando a Masaya el 28 de junio a las seis de la mañana. Ese era el Plan acordado con la Dirección Nacional Conjunta del FSLN clandestino. Antes de comenzar a movilizarse el Repliegue, los jefes guerrilleros orientan en voz bajita: “Pasen la voz, de uno en uno: deben levantar bien los pies para no tropezar ni hacer ruidos. No deben encender fósforos ni cigarrillos.
Quítense las camisas y pantalones blancos, no lleven en las manos cosas que brillen como relojes. !Hagan silencio completo. De todo esto dependerán nuestra vidas¡”. Añadían: “Hagan lo posible por llevar lo menos posible de peso para que vayamos livianos durante el camino”. Empero, hubo hombres y mujeres que llevaban hasta valijas medianas consigo, y ropas puestas encima muy variadas. !Claro¡, las ropas blancas se las quitaron¡ Desde su salida, el Repliegue Táctico de Managua a Masaya es dividido en tres grandes columnas. La Vanguardia jefeada por los Comandantes William Ramírez Solórzano, Joaquín Cuadra Lacayo y Raúl Venerio. Esta columna comprendía los Combatientes Populares, población civil y heridos de las Colonias Nicarao, Catorce de Septiembre, Santa Julia, Don Bosco, Diez de Junio, San Rafael y Rubenia. La del Centro jefeada por los Comandantes Carlos Núñez Téllez, Osvaldo Lacayo y Walter Ferrety.
En esta iban los Combatientes Populares y población civil de vecindarios como: Ducualí, Paraisito, El Dorado y María Auxiliadora. La Retaguardia encabezada por los Comandantes Ramón Cabrales Aráuz, Marcos Somarriba García, Mónica Baltodano Marcenaros y Rolando “Cara Manchada” Orozco. En esta columna van Combatientes Populares, heridos y población civil de Bello Horizonte, Santa Rosa, Carretera Norte y Salvadorita (hoy Cristian Pérez). Además, internamente, estas grandes columnas se dividían en otras columnas, con el fin de resguardar el orden y seguridad de la marcha y de los jefes guerrilleros, dirigidas por los también jefes guerrilleros César Augusto Silva, Iván García Abarca y el mismo Rolando “Cara Manchada” Orozco. El Repliegue Táctico de Managua a Masaya sale por el tope de la gasolinera San Rafael, casi a las 11 de noche del 27 de junio de 1979, gira a la derecha, llega a la cuadra siguiente en que estaba la Farmacia González (estaba en una esquina frente a la esquina Noreste de la Colonia Nicarao); aquí se gira a la izquierda rumbo al semáforo de Rubenia, de donde se sigue al Este sobre la Pista a Sabana Grande, en la esquina siguiente se dobla hacia el Sur por la calle principal de la Colonia Catorce de Septiembre.