Una cámara de seguridad en el exterior de una residencia en la ciudad de Thornton (New Hampshire, EE.UU.) captó el momento en que un intrépido gato ahuyentó a un oso negro que se acercaba al jardín de la propiedad de su dueño. El minino, de raza Maine Coon y nombre Bruno, no dudó en corretear al visitante, que se sintió intimidado y no tuvo más remedio que retroceder y escabullirse a toda velocidad en el bosque.