El estudio encontró similitudes morfológicas y geológicas de este coloso volcánico marciano de casi 22 km de altura con tres islas volcánicas activas de la Tierra
Una investigación realizada por un equipo científico de la Universidad París-Saclay (Francia) y la Universidad de Lisboa (Portugal) señaló que el Monte Olimpo (Olympus Mons), el volcán más grande del sistema solar, podría haber sido alguna vez una isla en un vasto mar.
Evidencias geológicas
El estudio encontró similitudes morfológicas y geológicas de este coloso volcánico marciano de casi 22 km de altura con tres islas volcánicas activas de la Tierra. Estas son: la isla Pico, en Portugal; la isla Fogo, en Canadá; y la isla de Hawái, en EE.UU. Este resultado se suma a un creciente cuerpo de evidencias sobre el pasado acuoso de Marte.
“Aquí mostramos que el volcán gigante Monte Olimpo comparte similitudes morfológicas con islas volcánicas activas en la Tierra, donde las principales rupturas de pendientes de construcción ocurren sistemáticamente en la transición mar-aire en respuesta a los fuertes contrastes de viscosidad de la lava“, escribió el equipo de investigadores en un artículo publicado, este lunes, en Earth and Planetary Science Letters. “Esto nos lleva a proponer que Monte Olimpo era una antigua isla volcánica rodeada de agua líquida”, agregan.
También se identificaron características similares en otra montaña volcánica marciana, Alba Mons, ubicada en una vasta extensión de tierras bajas a más de 1.800 kilómetros del Monte Olimpo. Esto podría significar que las aguas de este océano desaparecido, alguna vez llenaron grandes secciones de la superficie marciana.
Importantes pistas
Los expertos señalan que los resultados del análisis podrían darnos algunas pistas sobre la historia del agua de Marte. Por ejemplo, la altura de la escarpa principal que rodea al monte (unos 6 km) sería el nivel del mar del océano perdido hace mucho tiempo. Y la edad de los flujos de lava, que data de hace unos 3,7 a 3 mil millones de años, nos dice cuándo ese océano habría estado allí.
Las costas volcánicas recientemente propuestas se pueden fechar mediante métodos radiométricos, lo que conlleva formas excepcionales para rastrear el agua líquida temprana y proporcionar información valiosa sobre el destino de los océanos marcianos.