“Los niños nacidos hoy que vivan hasta los 70 años podrán presenciar la desaparición de miles de especies de plantas y animales”, sostuvo uno de los autores de la investigación
Investigadores de la Comisión Europea y la Universidad de Flinders (Australia) han pronosticado, utilizando una supercomputadora, la extinción de una cuarta parte de la biodiversidad para 2100 debido al cambio climático y los cambios en el uso de suelo.
Según detallan los científicos en una investigación publicada recientemente en la revista Science Advances, la coextinción, es decir, la extinción de una especie debido a la desaparición de otra, provocará la pérdida del 10 % de los animales y las plantas para el 2050, alcanzando al 27% hacia finales del siglo XXI. Además, los expertos alertan que el escenario más aterrador se observa con respecto a las especies vulnerables, cuya tasa de extinción total podría alcanzar al 184 % en condiciones de emisiones de carbono intermedias.
Mediante el uso de una de las supercomputadoras más potentes de Europa, los expertos crearon una Tierra virtual y más de 15.000 redes alimentarias para predecir el destino interconectado de las especies.
En tres escenarios diferentes de cambio climático, se llevaron a cabo simulaciones de las cadenas tróficas y fueron evaluadas las respuestas de las interacciones ecológicas ante dos factores antropogénicos, cambios en el uso de suelo e incremento de la temperatura de la Tierra, obteniendo como resultado que el planeta perderá una cuarta parte de su diversidad de especies.
“Los niños nacidos hoy que vivan hasta los 70 años podrán presenciar la desaparición de miles de especies de plantas y animales, desde diminutas orquídeas y los insectos más pequeños, hasta animales emblemáticos como el elefante y el koala… todo durante una vida humana”, dijo Corey Bradshaw, uno de los autores de la investigación.
“Cada especie depende de otra de alguna manera”, manifestó Corey al explicar que es el primer estudio que considera las coextinciones al evaluar los impactos antropogénicos en los animales y plantas, alegando que la desaparición de las especies afecta de manera directa o indirecta la extinción de otras.
En ese contexto, los investigadores advierten que es urgente implementar medidas que contemplen las interacciones ecológicas y su rol en los procesos de extinción. De otra forma, no se podrá evitar la disminución de especies. Asimismo, recalcan que la pérdida de biodiversidad vendrá acompañada de un debilitamiento de la resiliencia de las comunidades debido al desgaste de las redes ecológicas.