El hallazgo fue realizado en la tumba de Meret-Neith, una importante mujer de la Dinastía I egipcia que pudo ser la primera reina del país
Un equipo internacional de arqueólogos ha descubierto en Egipto cientos de jarras de 5.000 años de antigüedad, algunas de las cuales contienen restos de vino, informa el diario local Al Ahram, citando un comunicado del Consejo Supremo de Antigüedades del país.
Las vasijas, varias de ellas con sus tapones intactos, formaban parte de ajuares funerarios desenterrados en la tumba de Meret-Neith, una importante mujer de la Primera Dinastía egipcia, en el sitio arqueológico de Um Al Qaab, en Abydos, en la gobernación de Sohag.
Inscripciones encontradas en el lugar indican que Meret-Neith estuvo a cargo de oficinas del gobierno central, como la Tesorería, lo cual apoya la hipótesis de que desempeñó un papel históricamente significativo, señaló Mostafa Waziri, secretario general del Consejo Supremo de Antigüedades.
Por su parte, Dietrich Raue, director del Instituto Arqueológico Alemán, remarcó que Meret-Neith es la única mujer con una tumba monumental en Abydos, el primer cementerio real de Egipto, lo que indica que probablemente era la fémina más poderosa de su época.
El experto destacó que las excavaciones arrojan más luz sobre esta “mujer única y su era” e, incluso, hacen sugerir que pudo haber sido la primera reina femenina del Antiguo Egipto, anterior a la reina Hatshepsut, de la Dinastía XVIII.
El complejo funerario, construido con ladrillos de barro sin cocer, arcilla y madera, incluye la tumba de la posible monarca y otras 41 tumbas de sirvientes cortesanos. Los arqueólogos observaron que las tumbas se construyeron en distintas etapas.
Para E. Christiana Köhler, jefa del equipo de excavaciones, el hecho de que las tumbas se construyeron por etapas durante un período relativamente largo de tiempo, junto con otras evidencias, desafía la teoría no probada de los rituales de sacrificios humanos durante los entierros de gobernantes en la Dinastía I de Egipto.